Publicado por: Claudio Nuñez | sábado 10 de octubre de 2020 | Publicado a las: 12:54
Por Eugenio Tuma, ex senador
Una de las peores amenazas que enfrenta nuestra Región es que la violencia se naturalice como parte de la vida cotidiana de la sociedad y las familias de la Araucanía. El Estado de Chile ha condenado a nuestra Región como zona de sacrificio, nadie duda de la deuda con las víctimas mapuches y no mapuches, pero no existe justificación para los actos de violencia que siguen cobrando víctimas inocentes.
No podemos acostumbrarnos al recuento de la violencia, hoy fueron 13 camiones de una empresa que presta servicios en la zona, generando incertidumbre, temor y destruyendo más fuentes de trabajo en nuestra alicaída región, ayer fueron víctimas mapuches o no mapuches.
El listado de violencia es extenso, al igual que el fracaso de las iniciativas del Estado sea en la modalidad de represión, prevención o desarrollo. Es preciso que todas las instituciones del Estado se esfuercen por garantizar las condiciones mínimas de la familia de la Araucanía, que es la paz, la integridad física y el respeto a los derechos de todos los sectores.
Vamos a enfrentar un proceso Constitucional que debería ofrecer caminos de solución para el pueblo Mapuche, por cierto, pero también para la población toda, reconociendo la Araucanía como un territorio especial. Así es, somos un territorio especial, multicultural, ocupado, tensionado, fracturado por la violencia, pero no vamos a ceder, no vamos a bajar los brazos para exigir seguridad, tranquilidad y seguiremos impulsando el diálogo para alcanzar la paz basada en el respeto y la justicia.