Publicado por: Claudio Nuñez | jueves 14 de julio de 2022 | Publicado a las: 13:01
Un interesante análisis de los indicadores que mide el Índice de Confianza Empresarial Araucanía (ICE Araucanía) realizó la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma de Chile.
Tras la reciente emisión del boletín de junio, el cual muestra que la región de movió levemente hacia un nivel muy pesimista (-39), luego de haber enfrentado la caída más fuerte desde su creación durante el mes de mayo (-50) que posicionó al indicador en un terreno extraordinariamente pesimista.
Al respecto, Humberto Salas, académico responsable de la medición, afirmó “durante el primer semestre de 2022 el ICE Araucanía ha transitado entre el pesimismo leve y moderado, agudizándose en las últimas mediciones. Al ser comparado con igual fecha de 2021, el informe muestra que el panorama regional era similar pues la confianza se mantiene el tramo moderadamente pesimista”.
Agregó “los sectores que han mostrado un mayor grado de pesimismo durante este primer semestre son el financiero, transporte y agrícola-forestal y en menor medida la construcción e industria con pesimismo moderado y leve respectivamente. Por la otra vereda transita el comercio que en promedio se han mostrado levemente optimista durante la primera fracción del año”.
Salas dijo que las principales variables que explican el pesimismo promedio de este primer semestre “se encuentran la proyección negativa respecto del precio de los insumos y las proyecciones que hacen los distintos sectores de situación económica, siendo estas extremadamente pesimistas. En una menor medida, pero también en terreno de pesimismo moderado se encuentran la disposición a contratar trabajadores y las proyecciones sobre la situación de los negocios en cada uno de los sectores”.
Esta visión negativa que han manifestado los representantes de los sectores consultados se arrastra desde junio de 2019, y al parecer seguirían posicionándose en las similares categorías durante los próximos meses.
En esta materia, el académico de la Autónoma señaló que todas estas expectativas “se muestran en La Araucanía en un escenario inflacionario que ha incrementado considerablemente los costos de producción especialmente en sectores importadores de insumos y bienes terminados. El alto costo del financiamiento para pequeñas y medianas empresas derivado de la política monetaria y la fuerte caída que ha sufrido la inversión privada, especialmente en nuestro territorio, podrían conjugarse para ralentizar el mercado laboral que hasta la fecha se ha mantenido dinámico, sin embargo, sigue mostrando brechas notables de género y formalidad”.
MIRADAS DE LA REGIÓN
Tras la presentación de este informe los representantes de diferentes sectores realizaron un análisis de la realidad que los afecta. El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo, Gustavo Valenzuela, aseveró que luego del alza en ventas que tuvo el sector producto de la apertura comercial desarrollada tras el cambio en las normativas sanitarias, a partir del reciente semestre recién es posible ver cifras más exactas y reales.
“En las mediciones de mayo y junio vemos que las ventas de los negocios minoristas están bajando, tenemos un 19% a la baja respecto al año anterior, porque estábamos viviendo de una ilusión que provocó el cierre total del comercio en los meses pasados. Por otra parte, respecto al turismo, antes La Araucanía recibía cerca de un 10% de todos los turistas que ingresaban al país y hoy es mucho menor ya que solo responde a turismo local, el cual hoy nos permite tener casi en un 85% la capacidad hotelera, a pesar de no contar aún con un protocolo de apertura total”.
En tanto, el secretario ejecutivo de Sofo, Andreas Kobrich, afirmó que los diferentes hechos de violencia registrados en la zona afectan directamente la percepción de confianza y el desarrollo del rubro agrícola.
“La violencia que se desarrolla en el mudo rural y todos los habitantes que transitan por caminos secundarios, desde trabajadores, camioneros y prestadores de servicios, se dan cuenta de esta situación. La incertidumbre es otro freno a la producción y sumado al alza de los insumos y fertilizantes afecta directamente a desarrollar el total potencial productivo que pudiéramos tener acá en la región”.
Mientras que el seremi de Hacienda, Ronald Kliebs, sostuvo “el gabinete ha trabajo fuertemente en iniciativas para esta región, para articular el trabajo en mesas con los gremios y con las entidades públicas”.