Extraer, potabilizar, distribuir, tratar, y recolectar agua de manera rápida, eficiente y con calidad se hace cada vez más desafiante y la tecnología es una pieza clave en la mejora continua. Es por eso que Aguas Araucanía activó una alianza con la Universidad de La Frontera (UFRO), que consiste en que los estudiantes de distintas carreras, relacionadas a la ingeniería y ciencia, tengan la oportunidad de innovar en soluciones y mejoras de los procesos en la entrega del agua en la región.

Actualmente, se están desarrollando dos proyectos en paralelo, que se encuentran en etapa de validación de prototipos y cuentan con la participación de ocho estudiantes.  El primero tiene que ver con la implementación de un punto de carga de agua a granel para camiones aljibes, a través de un prototipo funcional de hardware y software que permita su acceso, llenado y comercialización en forma autónoma y remota. Este funcionaría en modo de autoservicio con una tarjeta de prepago, que esté vinculada con la base de clientes de la compañía.

En tanto, el segundo proyecto consiste en sistematizar el proceso de registro de medición de variables de calidad del agua, que son recopiladas en las plantas de Aguas Araucanía, a través del desarrollo de un prototipo funcional de aplicación móvil y plataforma web conectada a la nube.  Se busca desarrollar un sistema liviano, fácil de usar y aprobado por los operadores de planta, que serán los usuarios principales.

El director del Instituto de Innovación y Emprendimiento UFRO (iDEAUFRO), Carlos Isaacs, destacó que tienen una larga experiencia de trabajo colaborativo con Aguas Araucanía. Detalló que las tecnologías utilizadas en estas iniciativas “involucran electrónica, desarrollo de software y aplicaciones e internet de las cosas (IoT), pero estamos innovando en nuestras prácticas formativas para ayudar a la empresa a avanzar en la analítica de datos y la inteligencia artificial en las próximas etapas.  Estas tecnologías serán el motor de la industria y los negocios en los próximos años”, dijo

Isaacs agrega que esta alianza permite que los estudiantes tengan un aprendizaje activo, donde “son desafiados a resolver problemas reales, diseñando soluciones y construyendo prototipos que son testeados y evaluados por profesionales de la empresa, quienes les entregan retroalimentación para mejorarlos en etapas sucesivas. Los alumnos se sienten valiosos y desafiados, construyendo no solo aprendizajes significativos, sino también capacidad de asumir riesgos y tolerar la frustración”, sostuvo.

El gerente de Operaciones de Aguas Araucanía, Marcos Díaz, destacó el aporte que han entregado los estudiantes en el desarrollo de innovaciones y que esta instancia “se convierte en un campo de experimentación un poco más grande que las aulas para la formación de ingenieros, y se les incentiva a pensar en sus propios desarrollos y por qué no, en sus futuros emprendimientos”.