A la fecha, la alianza ha graduado a 17 estudiantes – 15 italianos y 2 chilenos- pero Sharon es la única italiana que completó su programa doctoral en la UFRO, razón por la que su graduación constituye un hito dentro del quehacer del doctorado.

Sharon Viscardi (28) es la primera graduada italiana en Chile del “Joint International Doctorate in Environmental Resources”, programa que realiza de manera conjunta el Doctorado en Ciencias de Recursos Naturales de la UFRO con el Doctorado en Ciencias de Recursos Ambientales de la Universidad Federico II de Nápoles en Italia.

A la fecha, la alianza ha graduado a 17 estudiantes – 15 italianos y 2 chilenos- pero Sharon es la única italiana que completó su programa doctoral en la UFRO, razón por la que su graduación constituye un hito dentro del quehacer del doctorado.

La estadía de la investigadora comenzó en 2014, gracias a las relaciones de colaboración que mantienen la Dra. María de la Luz Mora -Directora de BIOREN-UFRO- y la Dra. María Rao, directora del programa en la universidad italiana.

UNA NUEVA MIRADA

Junto a Sharon, llegaron otros cinco investigadores, pero solo ella no solo decidió quedarse y terminar en Chile su formación doctoral, a la vez que hizo un cambio radical en su vida académica y personal.

“El doctorado de la U. Federico II de Nápoles exige una pasantía de al menos 3 meses en una universidad extranjera. Enfrentar esa situación fue muy difícil al principio, no quería, estaba asustada, pensaba que no podía estar acá, que mi familia no podría estar sin mí, etc.”, relata Sharon. Hoy, cuando recuerda esos temores, se da cuenta que también era un poco de inmadurez, porque cuando conoció Chile, la ciudad de Temuco, a sus compañeros, profesores, el estilo de vida y la modalidad de trabajo, todo cambió. “Me gustó todo lo que vi, aquí había oportunidades, sentí que era el momento de dar un giro y me concentré en terminar el doctorado aquí”.

Los tres primeros meses de estadía se le hicieron cortos, volvió a Nápoles y allá se dio cuenta que lo que quería académica y personalmente lo había encontrado en Chile, en Temuco, en la Universidad de La Frontera. Y gracias al convenio entre ambos doctorados, le permitió graduarse aquí. “El cincuenta por ciento del programa lo cursé acá y es la mejor decisión que pude haber tomado”.

MOTIVACIONES E INVESTIGACIONES

El cambio de vida no solo supuso la adaptación a vivir en una país diferente, sino también a pensar y trabajar de manera distinta. “En este programa yo aprendí a pensar, a reflexionar, a tomarme el tiempo necesario. En Italia dedicaba muchas horas al trabajo pero na había un pensamiento crítico de mi parte, tenía una mala concepción de lo que era el trabajo”.

La Dra. Viscardi reconoce por sobre todas las cosas, el estímulo que recibió en el Doctorado en la UFRO y de parte del equipo de BIOREN-UFRO. Se unió al grupo liderado por la Dra. María de la Luz Mora -Directora del Núcleo- y comenzó a trabajar en su tesis con la Dra. Paola Durán, quien fue su tutora, mientras que desde Italia la dirigió la Dra. Olimpia Pepe.

“Mi línea de investigación es el empleo de bacterias protecnológicas en aplicaciones eco-sustentables. Antes trabajé con bacterias productoras de ácido succínico para generar bioplásticos y luego derivé  al estudio de bacterias promotoras del crecimiento de plantas”.  Esta última es la que más desarrolló, al alero del grupo de investigación que dirige la Dra. Mora.

Todo esa dedicación significó que el futuro laboral se ve auspicioso y motivante. La investigadora trabaja estrechamente con la Dra. Paola Durán como asistente de investigación del Proyecto Fondecyt de Iniciación que lleva a cabo; tiene en agenda postular a los proyectos de Valorización a la Investigación Universitaria (VIU) y prepara la postulación al Proyecto Fondecyt de Posdoctorado con el Dr. Milko Jorquera.

NUEVA VIDA AL SUR DEL MUNDO

Sharon no solo se ha desarrollado como científica,  su vida personal también dio un vuelco. Aquí se enamoró, se casó e incluso comenzó un emprendimiento gastronómico. Dado su expertise en biotecnologías, actualmente experimenta junto a su marido en la fermentación de la masa ácida, que en Nápoles se conoce como masa madre, base de la tradición de las pizzerías napolitanas.

“Tenemos una pizzería en Padre Las Casas, no tengo tiempo de aburrirme. Trabajo en la UFRO y por las tardes me dedico a nuestra pizzería. Esto es más de lo que podría haber aspirado en Italia, la crisis económica se hace sentir en mi país, no hay espacio para emprender ni para desarrollarse profesionalmente, pero acá encontré mi lugar en el mundo”, sostuvo.