Publicado por: Claudio Nuñez | domingo 2 de enero de 2022 | Publicado a las: 11:12
“Abrimos la puerta día a día para salir a trabajar y la desigualdad nos da un golpe en la cara. Las cifras son muy grotescas. El nuevo World Inequality Report (Informe mundial sobre la desigualdad) muestra que la mitad más pobre no tiene riqueza (promedio patrimonio negativo) y el 1% más rico se lleva el 50% de la riqueza”.
Escribe: Marcos Vásquez, director de la Carrera de Contador Público y Auditor de la Universidad de La Frontera y concejal por la comuna de Temuco.
La música me acompaña habitualmente en mis reflexiones. La simpleza de los sonidos y la consistencia de las letras nos llevan a espacios individuales que nos dan la posibilidad de pensar y cuestionarnos el mundo actual y sus acciones.
Al mundo le falta un tornillo es un tango argentino-uruguayo compuesto por José María Aguilar Porrás con letra de Enrique Cadícamo en 1932. Fue grabado por Carlos Gardel para el sello Odeón, y unas de las versiones más reconocidas es la de Julio Sosa, grabada en 1957 para RCA Víctor con la orquesta de Armando Pontier. Su letra es muy atingente a lo que sucede en nuestros días en Chile y el mundo.
“Hoy no hay guita ni de asalto, Y el puchero está tan alto que hay que usar el trampolín. Si habrá crisis, bronca y hambre que el que compra diez de fiambre hoy se morfa hasta el piolín”.
La inflación en Chile va camino a tocar el 7% anual. En noviembre los precios volvieron a subir 0.5% respecto al mes anterior y acumula un alza de 6,7% a doce meses. Lo anterior se ha hecho sentir en las remuneraciones de las y los chilenos. Los sueldos y salarios han perdido su poder adquisitivo, ósea con la misma plata hoy se compra menos.
Los economistas han comenzado a incluir en sus proyecciones para los próximos dos años un clima laboral más complejo. Las negociaciones colectivas serán vitales. La calidad de vida depende del poder adquisitivo de los salarios de las y los trabajadores en Chile.
La desigualdad sigue siendo otra piedra en nuestro zapato. Abrimos la puerta día a día para salir a trabajar y la desigualdad nos da un golpe en la cara. Las cifras son muy grotescas. El nuevo World Inequality Report (Informe mundial sobre la desigualdad) muestra que la mitad más pobre no tiene riqueza (promedia patrimonio negativo) y el 1% más rico se lleva el 50% de la riqueza. Si ampliamos al 10% más rico, se lleva el 80% del total de la riqueza. El informe concluye que en los últimos 25 años los niveles extremos de desigualdad han aumentado.
“Hoy se vive de prepo y se duerme apurado y la barba hasta a Cristo se la han afeitao” sigue la letra de la canción. Una sociedad que está saliendo de una gran pandemia a nivel mundial, con apoyo de política públicas con fecha de vencimiento nos deben tener alertas. Será necesario volver a la focalización de los apoyos. Lo anterior a fin de lograr el impacto que nos permita pasar con éxito los próximos 24 meses.
El nuevo administrador del Estado por los próximos 4 años deberá tener como prioridad trabajar con el Banco Central para frenar la inflación, ver estrategias innovadoras de congelamiento de precios de algunos bienes y servicios, llevar adelante una nueva reforma tributaria y buscar herramientas que han sido exitosas en materia de disminución de las desigualdades en Chile.
Al mundo le falta un tornillo que venga un mecánico a ver si lo puede arreglar.