El edil y familiares de víctimas del accidente protagonizado por un bus de la empresa Nar Bus sostuvieron reunión con autoridad ministerial en la zona.

El 27 de mayo de 2016 será una fecha imborrable para quienes protagonizaron el fatal accidente de la ruta Imperial – Carahue que involucró a un minibús de la empresa Nar Bus y  2 vehículos particulares, donde 5 personas perdieron la vida y varios más resultaron heridos.

Hecho que motivó la acción del concejal por Carahue, Samir Manukian, quien llegó junto a los familiares de víctimas y heridos del accidente hasta la oficinas de la seremi de transportes de La Araucanía, Doris Tello, a plantearle la necesidad urgente de fiscalización en la zona; lo que a juicio del edil, es la principal causa de este fatal accidente.

“Se le planteó a la Seremi la urgencia de establecer puestos de control de velocidad, mejorar la señalética y fiscalizar los horarios de trabajo de los choferes, como medidas que impidan que un hecho tan grave como este pueda volver a ocurrir en nuestra ruta”, enfatizó Manukian.

Para los asistentes a la reunión, esta fue una positiva instancia que permite superar el duelo y el temor que genera el traslado diario en una ruta peligrosa y les impulsa a hacer acciones que prevengan estos hechos y las constantes “carreras” por pasajeros de la que muchos dijeron ser testigos.

Manukian aseguró que pese a que la autoridad regional reconoció la falta de herramientas legales que le permitan aumentar la fiscalización no descansarán hasta conseguir que las autoridades den respuesta concreta a las necesidades de seguridad vial de los habitantes de la zona costera.

Al respecto, el Senador Eugenio Tuma comprometió gestiones en la Dirección de Vialidad a fin de conseguir que en el más breve plazo se realicen los trabajos de mejora de señalética solicitado por los vecinos.

Por su parte, la Seremi comprometió acciones inmediatas entre las cuales se cuenta una reunión de planificación en la zona a realizarse durante la próxima semana, en la cual se espera establecer un protocolo de trabajo permanente de fiscalización en la ruta.