Publicado por: Francisco Carrasco | jueves 2 de julio de 2015 | Publicado a las: 20:46
El alcalde del municipio de Gorbea, Juan Esteban Meza, presentó a la Superintendencia de Medio Ambiente todos los antecedentes que permitan verificar si la instalación de una planta de residuos hospitalarios a metros de predios frutales y producciones apícolas, en el sector Quesquechán entre las comunas de Gorbea y Loncoche, se encuentra en regla.
Es así que el jefe comunal respondió las denuncias de comunidades y vecinos del sector quienes afirman que esta planta estaría contaminando a través de la emanación de gases tóxicos producto de la incineración de producto quirúrgicos y hospitalarios.
“Estamos pidiendo que la Superintendencia de Medio Ambiente haga una evaluación del proyecto, y que establezca si hay o no, elusión de la ley del medio ambiente, con el objeto de no tener declaración de impacto ambiental y menos estudio de impacto ambiental”, explicó Meza.
La intención es que la Superintendencia determine cuáles fueron los procedimientos que permitieron a la empresa poder acceder a la patente comercial que permite el inicio de su labor. Mientras tanto los vecinos señalan que continuaran con las manifestaciones.
Recordemos que esta planta se encuentra en etapa de marcha blanca. Según los dirigentes y comunidades, la empresa no garantiza que los residuos que provoca no contaminen el sector ni provoquen daños a la producción agrícola del sector.Ellos afirman que la instalación de esta planta fue sin su consentimiento, y que su presencia en el lugar, afecta a un sector productivo que entrega más de 2.500 empleos en la zona.
“Esta planta viene a generar un impacto tanto en la salud, como en el sector productivo de los vecinos que viven alrededor de esta planta. Pedimos que está planta se erradique y se vaya del sector, porque son más de 300 familias directamente afectadas que viven alrededor”, sostuvo Alex Ceballos, presidente junta de vecinos del sector Quesquechan.
Desde la dirección general de esta planta, afirman que cumplen con toda la normativa, enfatizando en que no son una planta incineradora. “Nosotros para poder obtener los permisos sectoriales y ambientales, nos acogimos a todo lo que dicta la norma y el reglamento que regula al respecto, obviamente contemplando los criterios que tienen contemplados los servicios públicos para obtener los permisos”, indicó Rodrigo Sandoval, gerente general de la planta.