Publicado por: Claudio Nuñez | lunes 17 de abril de 2023 | Publicado a las: 16:35
Escribe: Patricio Ramírez, Coordinador Observatorio Económico Social, Ufro
El IPC de marzo anotó una variación mensual de 1,1% con lo cual la inflación anual se ubicó en 11,1%. ¿Es alta o baja la inflación del mes?: marzo 2022 registró una variación mensual de IPC de 1,9%; ante lo cual este resultado sale bien parado, pero debemos considerar que 2022 fue un año de altísima inflación (12,8% anual) por tanto no es una buena vara de comparación.
Si vemos lo ocurrido en marzo 2019, 2020 y 2021 donde el IPC marcó variaciones de 0,5%; 0,3% y 0,4% respectivamente, podemos darnos cuenta que es una cifra alta considerando el contexto histórico para el mes en cuestión. La variación mensual del IPC de marzo está explicada principalmente por la fuerte alza que registró la división de Educación (10,8%). Esto explica casi el 60% del IPC mensual. El reajuste de las colegiaturas y aranceles educacionales impulsó el costo de la vida de marzo. El servicio de enseñanza en centros de formación técnica marcó alza mensual de 14,6%; el servicio de enseñanza universitaria subió 13,2%; el servicio de educación de transición aumentó 13,1%; el servicio de transporte escolar subió 11%, entre las mayores alzas de la división.
Estas alzas son muy significativas ya que si bien ocurren una vez al año (en marzo), los nuevos precios de aranceles y colegiaturas se mantienen durante todo el año afectando el presupuesto. Po otro lado, los altos reajustes de esta oportunidad reflejan la alta inflación de 2022, ya que típicamente los valores se incrementan en base a la inflación pasada.
La situación actual y las perspectivas de corto plazo de la inflación son preocupantes. Aún tenemos una inflación anual de 2 dígitos (11,1%) que está golpeando directa y fuertemente la situación económica de todos, especialmente de las personas y hogares de menores ingresos. La inflación es dañina en términos generales, pero con mayor fuerza para los más vulnerables.
Además, genera incertidumbre que frena la inversión y el empleo. La unidad de fomento (UF) llegará a $36.000 a mediados de mayo con los efectos que eso implica en pagos de arriendos, dividendos, seguros, planes de salud, etc. En cuanto a las perspectivas, el reciente informe de política monetaria (IPOM) del banco central corrigió al alza todas las proyecciones de IPC para 2023, reconociendo con ello que la batalla contra la inflación está aún lejos de ser ganada y que será más larga y costosa de lo esperado meses atrás. Por tanto, la balanza se inclina más hacia una evaluación negativa hasta el momento, la inflación es un enemigo peligroso que no debemos subestimar.
La inflación anualizada anotó en marzo su cuarta caída consecutiva. En noviembre 2022 la inflación a 12 meses estaba en 13,3% y desde ahí comienza a descender mes a mes llegando a 11,1% esta última medición. Aún estamos en niveles altos de inflación anual, casi triplicamos la meta establecida por el banco central de Chile, sin embargo, la tendencia a la baja observada en los últimos meses es algo positivo, aunque quisiéramos que fuera con mayor fuerza.
Otro elemento a destacar es también la caída anual en el IPC de los alimentos. Registró su tercera baja consecutiva en términos anuales marcando un alza de 17,4% a 12 meses en esta última medición. Aún es muy alta, pero hace cuatro meses atrás marcaba 24,7%.
El alza en el precio de los alimentos se ha venido moderando en los últimos meses, pero lamentablemente los precios de esta división ya se encuentran en niveles muy altos, producto de las fuertes alzas que experimentaron en 2022. En los últimos 12 meses los alimentos han registrado una potente alza de 17,4% muy superior al alza del IPC general (11,1%). Lo que sucede con el precio de los alimentos es muy relevante, ya que es la división más importante en la canasta del IPC, tiene una ponderación de 19,3% la más alta de las 12 divisiones, eso significa, que una familia chilena promedio destina o gasta 19,3% de sus ingresos mensuales en alimentos, por tanto, alzas en esta división golpean de manera más fuerte a los ingresos de las personas, y en particular a los de menores ingresos