Publicado por: Claudio Nuñez | lunes 25 de julio de 2016 | Publicado a las: 15:59
El documentalista Daniel Osorio tiene más de 40 años y sigue soltero. A él le da igual pero no a su entorno: amigos, familiares y la sociedad entera parecieran demandarle que cumpla su rol social.
A partir de ahí, Osorio construye una película con agudeza y sentido del humor, en la que se formula preguntas como ¿por qué el matrimonio tiene tan buena prensa y la soltería no? o ¿por qué la opción de vivir y terminar solo le parece a todos tan mala? Tratando de responder estas interrogantes, el director se irá percatando de que su opción por la soltería no es tan clara como cree ni tan feliz como imaginaba.
MiraDoc, el exitoso programa que se ha dedicado a la difusión del cine documental a lo largo del país, estrena El soltero de la familia el próximo jueves 4 de agosto a las 19:00 horas en el auditorio de la universidad Santo Tomás, ubicado en Rodríguez 060. Una segunda función se realizará el jueves 11, a la misma hora. La entrada tiene un valor general de $ 1.000 pesos y $ 500 para estudiantes.
Sobre la cinta
Daniel Osorio cuenta que la idea del documental nació luego de ver muchas películas en Fidocs. “Tras ver muchos documentales, descubrí que contar historias sobre la vida real era lo que quería hacer. Luego de darle vuelta a posibles temas se me ocurrió que el que más conocía era yo mismo. Eso, junto a una campaña familiar para que deje mi soltería, me llevó a la idea de una película que muestre qué significa estar solo, decidir estar solo, y cómo uno sobrevive a la sociedad que lo bombardea con la idea de casarse», comenta.
El director destaca principalmente el humor del film. “No es muy usual en el documental chileno”, opina. “Por eso se habla de comedia documental. Se trata de una película con mucha ironía, con un lenguaje cercano al espectador, con algunos personajes entrañables, como por ejemplo, Celino Villanueva: el hombre más viejo de Chile, y con un director-personaje que es capaz de reírse de sí mismo y que trata de encarar su vida con cierta dignidad que a veces se pierde y a veces se mantiene».
El cineasta concluye: “Es importante destacar que esta película se trata del trabajo de un director que apuesta por el documental. Es decir, como creador, no le parece lo mismo hacer ficciones que documentales. Es decir, no hace documentales a la espera de más fondos para hacer su “película” de ficción, su película de verdad. Los documentales para el director son la forma en que quiere trabajar también en el futuro. Su apuesta estética y ética tiene que ver con las historias reales como ésta”.