Corea del Norte impuso un control férreo en su frontera con el Sur ante lo que se percibe como una tercera ola del coronavirus en el país vecino.

Las autoridades norcoreanas están «estableciendo con firmeza un muro de bloqueo en las áreas cercanas a la frontera y la Línea de Demarcación Militar (LDM) y pidiendo a los trabajadores y residentes que mantengan un sistema de acción establecido, tomen bajo control inmediato las menores anomalías y respondan a ellas»

Por su parte, la cadena norcoreana KCBS comunicó que se está erigiendo un «muro de bloqueo» en el interior de la zona fronteriza y cerca de la LDM. Entre otras precauciones, según la emisora, las autoridades ordenaron recoger y destruir la basura marina para prevenir la transmisión del coronavirus.

Las medidas se están tomando ante el repunte de nuevos casos de COVID-19 en Corea del Sur. Hace unos días, la curva de contagios se aproximó a los 600 en 24 horas —el máximo desde marzo pasado— por lo que las autoridades endurecieron las restricciones en el área metropolitana de Seúl y varios distritos más.

En las últimas 24 horas, la cifra de nuevos casos bajó de los 500 por primera vez en cuatro días, hasta 450, según la Agencia para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KDCA). Desde que comenzó la pandemia, se confirmaron 33.824 casos de COVID-19 en Corea del Sur, incluidos 523 fallecimientos.

Corea del Norte no ha reportado hasta ahora un solo caso de infección por el SARS-CoV-2.