Michelle Bachelet, la expresidenta, participó en un conversatorio en la Universidad de Valparaíso donde analizó el avance global de la ultraderecha y la situación de la política chilena actual.

Durante su intervención, Bachelet expresó su preocupación por el creciente nivel de polarización en la política, señalando que esta ha generado un ambiente tóxico, donde las discusiones se centran más en ataques personales que en propuestas políticas que realmente puedan mejorar la vida de las personas y sus comunidades.

Bachelet destacó que este clima ha afectado la percepción de los ciudadanos sobre la política, señalando que muchas personas se sienten desilusionadas al ver a los políticos enfrentados por temas menores, mientras los problemas reales y fundamentales de la sociedad quedan desatendidos. En sus palabras, «la política está tóxica» y esto está alejando a los ciudadanos de la arena política, generando una creciente apatía.

Una de las críticas más fuertes que hizo la exmandataria fue hacia el uso que la ultraderecha ha hecho de las redes sociales, en especial de plataformas como TikTok.

Bachelet reconoció que los sectores más conservadores han logrado conectar de manera más efectiva con las audiencias jóvenes, utilizando estas plataformas para difundir sus mensajes y fortalecer su influencia. En un ejemplo personal, la expresidenta compartió una anécdota en la que un amigo le contó que la sobrina de este era una gran fanática de ella, pero que también seguía con gran interés los videos de José Antonio Kast en TikTok, lo que, según Bachelet, refleja la habilidad de la ultraderecha para conectar con el público a través de los medios digitales.

Finalmente, Bachelet reflexionó sobre la necesidad urgente de nuevos liderazgos en el país, pero señaló que no se trata de liderazgos basados en el género, sino en la empatía. Según ella, se requieren figuras políticas que sean capaces de ponerse en el lugar de los demás, de escuchar y comprender las realidades de las personas, y de trabajar para ofrecer soluciones a los problemas que afectan a la sociedad. En un contexto donde la polarización y el enfrentamiento parecen dominar el debate público, Bachelet subrayó la importancia de recuperar el respeto y la colaboración en la política.