Una instancia para conocerse fue la que este jueves vivieron los usuarios de la Residencia para la Superación de la Pobreza del Hogar de Cristo en Temuco, donde compartieron una cena con el Subsecretario de Servicios Sociales y El Seremi de Desarrollo Social de La Araucanía, Rodrigo Carrasco Junge.

En la instancia, las autoridades conocieron las historias de cada uno de los usuarios de esta residencia y compartieron opiniones con respecto al trabajo que como Gobierno y sociedad se hace para apoyar a las personas en situación de calle.

Sebastián Villarreal, Subsecretario de Servicios Sociales del Ministerio de Desarrollo Social, destacó esta instancia que permitió conocer sus diferentes historias de superación. “Fue un muy bonito espacio para reflexionar sobre los desafíos calle en temáticas de superación de la pobreza en Temuco, pero al mismo tiempo comprender y compartir de que para el Gobierno del Presidente  Sebastián Piñera, y para nosotros como Ministerio, las personas en situación de calle son parte de las prioridades del país; y que por lo tanto vamos a seguir avanzando y aprendiendo de estas experiencias para poder beneficiar y llegar a más personas” señaló Villarreal.

La Residencia para la Superación ofrece un hogar  temporal a personas en situación de calle que estén motivados por participar de un proceso de superación y cuenten con una actividad laboral constante y con ingresos autónomos que les permitan auto-sustentar sus necesidades básicas. En este sentido, la residencia proporciona alojamiento temporal a aquellas personas en situación de calle que están comprometidos con retomar el desarrollo de sus proyectos vitales.

Pedro Urrutia, Jefe de Operación Social del Hogar de Cristo en La Araucanía se refirió al trabajo que como institución tienen en la región.  “En nuestra región hay más de 400 personas que viven en la calle. En el territorio, nuestra fundación tiene la capacidad de acoger a 60 personas, lo que en invierno se incrementa a 80, por lo tanto, aún quedan muchísimas personas abandonadas. Y cuanto mayor es el tiempo en calle, mayor es el deterioro biopsicosocial de las personas, afectando sus capacidades, autoestima, relaciones familiares y expectativas. Se requiere de estrategias de atención especializada y permanente que vayan más allá de las condiciones climáticas invernales, cuando se activan dispositivos de emergencia. Esto no es responsabilidad de un solo actor, se necesita un trabajo en equipo que incluya al Ministerio de Desarrollo social, al Hogar de Cristo, a las empresas, los vecinos, necesitamos de todos para cambiar esta realidad” señaló Urrutia.

La residencia de La Araucanía fue inaugurada el año 2013 y es ejecutada por el Hogar de Cristo. Actualmente hospeda a 11 hombres y 2 mujeres.