Publicado por: Claudio Nuñez | miércoles 14 de septiembre de 2016 | Publicado a las: 23:18
“El proyecto no asegura la calidad”. “La propuesta fue diseñada desatendiendo el aporte de los rectores”. “La indefinición de lo público le hace daño a todo el proyecto”. Estas fueron algunas de las opiniones que expresaron los rectores de la Universidad de la Frontera Sergio Bravo, Universidad Católica de Temuco Aliro Bórquez y de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Ignacio Sánchez.
Cerca de 90 personas asistieron al encuentro “La UC Dialoga – Debate público”, actividad que se ha realizado en los distintos campus de la Universidad Católica, siendo ahora el turno de Villarrica. El objetivo fue discutir en torno al proyecto de Reforma a la Educación Superior, presentar propuestas y ahondar en los aspectos más críticos del proyecto, además de sus efectos en regiones.
“El proyecto no habla de las universidades regionales, siendo que 22 de las 27 instituciones que forman parte del Consejo de Rectores lo son”, afirmó el rector de la UC. “No es lo mismo ser egresado en una región de pocos recursos, que de Santiago. ¿Qué le faltó al proyecto? Propósito y diseño”, agregó el rector de la UFRO. “El proyecto tiene una visión centralista, que desconoce el aporte de las regiones. La reforma debe reconocer la diversidad geográfica y de realidades sociales existentes en el país”, comentó por su parte el rector UCT.
Un tema crítico fue el de financiamiento. “No estamos en condiciones de garantizar la gratuidad hasta el séptimo decil. Son muchos los recursos que se necesitan para eso”, afirmó Bravo. “El financiamiento basal es clave para que las universidades aporten al país. Si no aumentamos los recursos del sistema las universidades van a alcanzar su techo”, agregó Sánchez. Sin embargo, los tres rectores están de acuerdo con que el sistema requiere regulación, “aunque esto sin afectar la autonomía de las universidades”, aclaró Bórquez.
En general, las opiniones fueron más bien lapidarias con respecto a la reforma. “El proyecto no asegura la calidad, no hay un diseño que responda a la calidad de los profesionales que Chile demanda. La reforma debiera cambiar el sistema de educación de una vez por todas y no dar soluciones parche”, sentenció el rector Bravo. “Faltó hacerse la pregunta de qué país queremos para los próximos 30 años y qué educación tenemos que instalar para ese país”, añadió por su parte el rector UCT.
Finalmente, Ignacio Sánchez planteó que tres son los elementos que se deben abordar en el proyecto: calidad, equidad e innovación. “En el extranjero se están discutiendo cambios de malla, educación virtual, formación técnica, cómo aportar al país, y siento que aquí en Chile estamos entrampados en temas de regulación”, concluyó.