Publicado por: Claudio Nuñez | jueves 27 de julio de 2017 | Publicado a las: 16:47
Dr. Nelson Lagos
Director del Centro de Investigación e Innovación para el Cambio Climático (CIICC), Facultad de Ciencias UST
Investigador Núcleo Milenio MUSELS
El gobierno anunció la inclusión del cambio climático en el currículo de estudiantes de 3º y 4º medio. Esto, con el objetivo de potenciar la valoración de la naturaleza, reconocer la relación ambiente–sociedad y el rol de la sostenibilidad de esta relación para fortalecer la democracia. Sin embargo, la enseñanza del cambio climático también representa una oportunidad para potenciar el desarrollo del pensamiento crítico en nuestros estudiantes y la sociedad en general.
La comprensión del cambio climático requiere nociones de física, química, de escalas de tiempo geológico y ecológico, de sus impactos sobre los ecosistemas naturales y sectores socio-económicos.
Integrar estas disciplinas en forma transversal no será fácil sin potenciar una perspectiva crítica. La negación del cambio climático refleja esta falta de visión crítica, ya que simplemente se opone a la evidencia científica que indica que las acciones de las sociedades humanas han llegado a ser una fuerza adicional al sistema climático global. La opción tomada por el presidente Trump de salir del Acuerdo de París refleja este tipo de negación, la cual no debe confundirse con el escepticismo que nos permite examinar el peso de la evidencia y demandar más pruebas científicas cuando éstas son insuficientes. Potenciar el pensamiento crítico en las aulas permitirá que nuestros estudiantes analicen y evalúen las afirmaciones que pretenden describir los fenómenos climáticos en particular y, en general, revisar la calidad de la información que contienen opiniones que, en la vida cotidiana, redes sociales y TV abierta, tienden a presentarse como hechos cuando están lejos de serlo.