Los ministros de Pesca de la Unión Europea lograron un acuerdo unánime sobre las cuotas y medidas para la pesca en el Atlántico y el Mediterráneo en 2025. Este acuerdo, alcanzado tras dos días de negociaciones en Bruselas, incluye una reducción significativa del esfuerzo pesquero en el Mediterráneo, especialmente para los arrastreros en aguas de España, Francia e Italia. A pesar de la fuerte oposición inicial de España a las propuestas de la Comisión Europea, se logró un equilibrio entre la conservación de las poblaciones de peces y la viabilidad económica de las flotas pesqueras. Para mitigar los efectos económicos de las restricciones, se implementará un mecanismo de compensación que incentivará prácticas de pesca más sostenibles.

El acuerdo establece una reducción del 66% en los días de pesca de los arrastreros en el Mediterráneo occidental, con el objetivo de proteger las poblaciones de peces demersales. Además, se pondrá en marcha un sistema que recompensará a los pescadores que adopten métodos de pesca más selectivos y responsables, como el uso de tecnologías innovadoras y el cierre de áreas de pesca.

La negociación también contempló medidas alternativas, como la exclusión de ciertas zonas de pesca, que España había propuesto anteriormente con éxito. Estas decisiones son parte de los esfuerzos de la UE para equilibrar la sostenibilidad medioambiental con las necesidades económicas del sector pesquero, especialmente en un contexto de creciente presión sobre los ecosistemas marinos.