Esteban Barriga, candidato a concejal del Partido Socialista

Con 35 años Esteban Barriga se ha destacado por su lucha contra la discriminación. Hoy se atreve a buscar un sillón en el Concejo Municipal de Temuco y también se atreve a contar su historia de lucha y amor.

Tania Márquez K.

Desde que estaba en el colegio Esteban Barriga Rosales, tenía claro que su condición sexual era distinta y la enfrentó. No fue una tarea fácil pues proviene de una familia muy cristiana y conservadora, cuestión eso sí que no lo limitó para defender su  vida y para salir a luchar contra la discriminación.

De profesión relacionador público, en el año 2000 comenzó su carrera política como presidente de la agrupación Dame una Mano por los derechos de quienes viven con VIH, posteriormente comenzó su trabajo dirigencial en diversas organizaciones, hasta convertirse en director de la carrera de Relaciones Públicas del instituto Araucana y hoy se desempeña como funcionario del Injuv.

Fue dentro del Partido Socialista que lo escogieron como candidato a concejal, lo que lo obligó a reunir más de 3 mil firmas de apoyo y que hoy lo tienen como primero en la lista de candidatos al Concejo Municipal de Temuco.

Si bien asegura que no es el candidato de los gay, sino un candidato con condición gay asumida, cree que hoy Temuco necesita más diversidad y pluralismo, y que desde su perspectiva podrá apoyar a la capital regional.

 Estás de candidato del Partido Socialista a concejal y lo que te caracteriza es que serás el primer candidato en asumir que eres gay. ¿es efectiva tu condición sexual?.

-Yo soy el primer candidato abiertamente asumido gay en la región y en Temuco.

¿Crees que esto te favorecerá o será un tema en contra?.

-Somos una ciudad bastante conservadora, pero hay gente que sabe que la política no la haré desde mi condición sexual aunque claramente es un punto diferenciador. Hoy en el concejo municipal  hay una persona que está en silla de ruedas y una sola mujer, también puede haber una persona asumidamente gay, pero no seré el candidato de los gay. No puedo pretender llegar a ser concejal con eso, lo que quiero es representar lo que la ciudadanía quiere y quienes se han enamorado y nacido en Temuco, para ser una ciudad mucho más amigable.

¿Y entonces cuál será la diferencia entre tú y los otros candidatos?

– Un amigo me decía que Temuco es la puerta del sur, yo quiero que sea el corazón del sur del país. Nosotros tenemos una responsabilidad como capital regional de poder acoger y crecer de forma más equitativa, con dignidad en los barrios porque si bien  esta ciudad ha crecido más que eso se ha hinchado porque no ha sido planificada, necesitamos un plano regulador que planifique y no sólo tome lo que construimos en forma desordenada. Temuco es una capital riquísima en diversidad, con colonos y pueblo originario, y esa diversidad también religiosa y cultural debe ser nuestro punto de encuentro y no desencuentro, porque eso nos hace ricos. Imagínate que es la única ciudad con dos premios Nobel que vivieron en un solo lugar y eso no pasa en ninguna parte del país.

Pero además ya contamos con los recursos…

– Así es, el Casino entrega muchos recursos y por lo mismo lucharé para que exista un Fondeve cultural porque hoy en las grandes capitales del mundo los músicos y artistas son pagados por los municipios y acá tenemos talentos increíbles. Algo tiene esta ciudad que nos encanta, si bien es dura, nos gusta y debemos saber encontrar nuestra identidad y eso tiene que ver con el pueblo mapuche o bien con los universitarios que son 45 mil estudiantes los que han escogido esta ciudad y para que se logre ser una ciudad universitaria hay que buscar iniciativas que nos hagan más capital. Quizás podamos hasta hacer presupuestos participativos. Debemos recuperar el río Cautín y con una Isla Cautín que tenga identidad, no podemos meterle de todo, sino que se defina bien.

¿Hoy a Temuco le falta ser más tolerante?

-Todos día a día luchamos para no discriminar, pero lo que tenemos que hacer es más que tolerar es aceptarse con nuestras diferencias y cuando asumamos qué somos y qué queremos ser podemos avanzar como sociedad. Es increíble que en Temuco no se iza la bandera del pueblo originario, sin embargo vemos una fiesta de la cerveza donde la bandera alemana está por todos lados y eso es inaceptable. Nos negamos a ser lo que nosotros somos y para eso debemos asumir la diversidad como una realidad y sólo así podemos crecer. Mi idea es que una vez que estamos en el concejo municipal, donde necesitamos como socialistas un concejal, es luchar por asumir nuestra diversidad.

Temuco y La Araucanía es la región con el mayor número de evangélicos en el país. ¿No será contraproducente para tu candidatura, dado que ellos abiertamente han rechazado leyes como el matrimonio o adopción de niños por parejas del mismo sexo?

-Yo creo en Dios y creo en un Dios de amor y la verdad cada acción va en eso, y no creo que Dios castigue el amor. Mi madre va a una iglesia pentecostal y bueno tengo claro que va haber personas más radicales que no comprenden esta diversidad, pero la verdad que muchos amigos que están en grupos evangélicos no ven eso. Con mi elección no significará que habrá un libertinaje sexual dentro de la comuna, sino que quienes han visto mi trayectoria y camino durante 20 años que he sido dirigente van a aplaudir mi apertura mental.

Y me imagino que también hay quienes te están apoyando por ser consecuente con tu sexualidad y sin tapujos reconocerla…

– Me ha costado mucho mirar de frente porque cuando uno tiene una condición diferente es difícil. Yo he construido mi historia de vida con mucho esfuerzo, porque vengo de una familia humilde donde mi padre es carpintero y mi mamá maestra de cocina, pero ¿sabes? yo siempre he salido adelante con la verdad, porque nunca he ocultado de donde soy, de dónde vengo y creo que puedo ser un aporte esta vez desde el municipio.