Publicado por: Claudio Nuñez | miércoles 12 de octubre de 2016 | Publicado a las: 15:28
Su absoluto rechazo a una reciente iniciativa legal presentada por la diputada Camila Vallejos, del Partido Comunista, para quitar de la apertura de sesión en el Congreso la frase “En el nombre de Dios y la Patria”, manifestó el diputado Jorge Rathgeb.
El legislador, si bien respeta el hecho de que Chile es un Estado laico, precisó que “la petición de Vallejos va contra una tradición republicana que ha sido respetada por todos los gobiernos desde el siglo 19, incluso en los regímenes que la propia diputada representa, y donde se consagra la presencia de un Creador, lo que se replica en otros símbolos de nuestra Nación como el Himno Nacional con la frase como ‘majestuosa es la blanca montaña que te dio por baluarte el Señor’. En este sentido, me parece que más que modernismo, lo que busca Vallejos es desconocer toda identidad nacional para establecer un concepto generalizado como Pueblo, asimilando las denominaciones de retrógrados y fracasados regímenes comunistas y autoritarios como Cuba o la ex Unión Soviética donde las libertades de creencia y a pensar fueron por décadas restringidos”.
Rathgeb, señaló que desafortunadamente la diputada de la Nueva Mayoría, lo que hace con estos proyectos es virar la atención de la prensa y relativizar focos de discusión realmente importantes para la sociedad chilena como la aprobación del Presupuesto 2017.
“Por estos días estamos revisando la aprobación el Presupuesto 2017 el cual viene recortado a niveles históricos afectando a sectores como la Agricultura, el Emprendimiento y el Apoyo Social. Son estos temas y no la modificación a nuestras tradiciones las que deben importar, por eso es que desapruebo lo que hace la diputada Vallejos junto a otras autoridades como el diputado regional René Saffirio, Giorgio Jackson, Gabriel Boric, Sergio Aguiló, Cristina Girardi, Carol Cariola, Hugo Guriérrez y Guillermo Tellier, entre otros”.
Por último, Rathgeb recordó que en Chile más del 80% de la población profesa una religión basa en la presencia de un Dios, “por lo que su propuesta no deja de favorecer a una minoría y se aleja absolutamente del respeto de las creencias de la gran mayoría de los chilenos”. concluyó.