Publicado por: Claudio Nuñez | domingo 15 de septiembre de 2019 | Publicado a las: 16:50
El ruido puede dañar la audición de forma permanente e irreversible y lo hace en función de dos factores: la intensidad y el tiempo de exposición. Así lo afirma la fonoaudióloga Gloria Sanguinetti, Analista de Audiología y Calidad de los centros auditivos GAES, quien agrega que existe un factor de predisposición individual. “El daño se desarrolla en forma gradual con los años y no solo puede suceder al escuchar música con auriculares sino al exponerse a la contaminación acústica de tipo ambiental, laboral o por aficiones personales y entretenimiento” resume la experta.
El nivel de ruido recomendado por la Organización Mundial de la Salud para garantizar la salud es de 65 decibeles. “Con exposición superior a85 decibelios ya hay riesgo de pérdida auditiva si la exposición es constante y por encima de los 100 decibeles ya hay riesgo de pérdida inmediata y por encima de los 115 siempre hay daño” especifica la fonoaudióloga de GAES y añade que una exposición a 80 decibeles por más de ocho horas al día requiere de protección auditiva para no ocasionar lesiones.
Hipoacusia precoz
Para la experta estos factores condicionan que la pérdida auditiva aparezca a edades más tempranas de tal manera que los jóvenes adelantan estos problemas en unos 20 años. “A los 40 años ya tenemos personas con hipoacusia. Al principio solo afecta a las frecuencias agudas y luego la pérdida se hace más intensa con un daño que se hace permanente e irreversible, se pierden las frecuencias medias y bajas llegando a una sordera severa”. Otra consecuencia son los acúfenos o tinnitus que consiste en la percepción de ruidos o zumbidos en los oídos que no proceden de ninguna fuente sonora externa. Ad portas a las fiestas patrias y el día mundial de la discapacidad auditiva, los centros GAES entregan algunos consejos:
Recomendaciones básicas: