Un llamado público al Presidente de la República, para que convoque la conformación Comisión del más alto nivel, “que aborde la peor crisis de seguridad que enfrenta el país y la región, con expertos del más alto nivel, aprobados por el Senado, y se aboque en el diseño de una política pública nacional en esta materia con un plazo no mayor a seis meses”, realizó el consejero Marcelo Carrasco.

“Creo que el Gobierno debe actuar con rapidez, y la esperada visita del Presidente de La República, Gabriel Boric, a nuestra Región de La Araucanía, debiera ser la oportunidad propicia, para que anuncie una propuesta de este nivel, que es lo que la ciudadanía está demandando con urgencia”, manifestó el consejero.

«Nos parece importante que el Presidente de La República visite, después de un largo tiempo La Araucanía,  pero lo que no nos parece es que venga con una agenda secreta, creemos que esto se debe hacer de frente a los ciudadanos, traer medidas concretas en materia de seguridad, y también para superar la pobreza y la desigualdad que existe en nuestra región», agregó.

Marcelo Carrasco, dijo que el desafío de contar con una política de seguridad pública actualizada, está presente tanto en países desarrollados, como en vías de desarrollo, “y es consustancial al funcionamiento de una democracia, en tanto, incide la confianza de los ciudadanos, en el desarrollo social sostenible, y en la estabilidad institucional”, señaló.

El consejero lamentó que estemos siendo testigos, como sociedad, de una serie de situaciones, en materia de seguridad pública, que hasta hace unos años prácticamente eran inexistentes, como el sicariato, la presencia de bandas de crimen organizado cada vez más extendidas territorialmente, además de delitos violentos como «portonazos» o «encerronas», y un alarmante incremento de los homicidios.

“En los últimos seis años, las tasas de homicidio en Chile aumentaron un 70%, mientras que la percepción de daño provocado por el robo con violencia subió un 37% en una década, y en nuestra región, el delito de robo de madera  y el narcotráfico, marcan un cambio sustancial en la matriz delictual”, añadió.  

“El problema de fondo de la inseguridad, es que afecta negativamente al desarrollo humano, la calidad de vida de las personas y la consolidación de las instituciones democráticas, y por eso creo firmemente que el Gobierno debe actuar con rapidez, y lo primero que debe hacer es generar un acuerdo nacional y a la vez nombrar una Comisión Presidencial para enfrentar esta crisis con expertos del más alto nivel, aprobados por el Senado, para que diseñe y proponga una política pública nacional de seguridad, y los cambios institucionales en las policías y en los estamentos persecutores, ya que copiar modelos de otros países, no es una vía de solución, porque sus realidades estructurales y sociales son distintas”, explicó el consejero.