Investigadores han desarrollado un sistema que utiliza una onda de choque eléctrico para extraer la sal y otras impurezas del agua salada o contaminada, y podría ser ampliado para su uso en plantas de desalinización o purificación de agua.

Conocido como “electrodiálisis shock “, la técnica funciona mandando una onda de choque impulsada eléctricamente a un flujo constante de agua que fluye. El agua que con sal contiene una carga en sus partículas, lo que provoca que una corriente de agua salada sea empujada a un lado y separada de una corriente de agua dulce, para posteriormente ser canalizadas en tubos separados.

Un proceso de desalinización barata y eficiente que convierte agua salada, salobre o agua contaminada en agua fresca y limpia.

Así que los ingenieros del MIT, decidieron tomar un enfoque completamente nuevo, e investigaron qué sucede cuando se mezcla el agua y la electricidad, teniendo asombrosos resultados.

«Cuando una corriente eléctrica fluye a través del sistema, el agua salada se divide en regiones donde la concentración de sal es o empobrecida o enriquecida. Cuando la corriente aumenta a un cierto punto, se genera una onda de choque entre estas dos zonas, dividiendo bruscamente las corrientes y permitiendo que las regiones dulces y saladas sean separadas por una barrera física sencilla en el centro de la corriente «. Explica David L. Chandler, autor del la investigación.

Los campos eléctricos aplicados al agua son de alta tensión, lo que significa que el proceso no sólo podrá filtrar la suciedad y la sal, si no que también elimina las bacterias dañinas. Esto sugiere que el sistema podría ser utilizado para esterilizar el agua contaminada para beber.