Publicado por: Claudio Nuñez | lunes 23 de marzo de 2020 | Publicado a las: 18:14
El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Villarrica condenó a César Gerbacio Caquilpán Ailla a la pena de 12 años y 5 meses de presidio efectivo, en calidad de autor del delito consumado de homicidio simple de una lactante de 10 meses de vida. Ilícito perpetrado en junio de 2018, en el sector Chaura de la comuna.
En fallo unánime (causa rol 4-2020), el tribunal –integrado por las magistradas María Cecilia Zapata Pavez (presidenta), Alejandra Rosas Lagos (redactora) y Adriana Knopel Jaramillo– aplicó, además, a Caquilpán Ailla las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena.
Asimismo, Caquilpán Ailla deberá purgar la pena única de 3 años y un día de presidio, accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la inhabilitación absoluta de cargos u oficios públicos durante el tiempo de la condena, como autor de dos delitos de lesiones menos graves y un delito de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que entre la una y dos de la madrugada del 7 de junio de 2018, “en el sector Chaura, comuna de Villarrica, el imputado CÉSAR CAQUILPÁN AILLA se enfrascó en una discusión con golpes de puño con FRANCISCO HERNÁN MARINAO CALFIPÁN, hermano de la conviviente del acusado, para posteriormente perseguir a FRANCISCO MARINAO CALFIPÁN, quien se dirigía a su casa, ocasionándole heridas cortantes y punzantes con un arma blanca en los brazos y distintas partes del cuerpo”.
En dicho contexto, testigos que se encontraban presentes en el lugar intentaron intervenir para detener la pelea y las agresiones, siendo atacadas por el acusado. Así, Caquilpán Ailla ocasionó a María Nancy Calfipán Huenupán, madre de la conviviente del acusado, heridas cortante en el tórax y glúteo; y a David Hernán Marinao Manqui, padre de la conviviente del acusado, Caquilpán Ailla le mordió la ceja y párpado derecho, causándole una lesión compatible con mordedura humana.
Además, el acusado apuñaló a la víctima menor de 10 meses de vida, en los momentos en que la lactante era cargada en brazos por Arnoldo Francisco Calfipán Calfipán, sin que existiera ninguna agresión o provocación. Producto de la agresión la niña falleció por una herida corto punzante tóraco abdominal complicada con lesión de arterias mamarias internas, pericardio, diafragma, hígado y bazo, “lesión reciente, vital y mortal, considerada médico legalmente de tipo homicida”.