Con la presencia de la ministra de Justicia, Javiera Blanco; el general director de Carabineros, Bruno Villalobos; el director de la Policía de Investigaciones, Héctor Espinosa; entre otras autoridades, la Comisión de Constitución del Senado retomó la discusión del proyecto de ley que facilita la aplicación efectiva de las penas establecidas para los delitos de robo, hurto y receptación, y mejora la persecución penal en dichos delitos.

Luego del término de la sesión, el Senador e integrante, Alberto Espina (RN), señaló que el Ejecutivo debe mantener la suma urgencia para despachar prontamente la iniciativa, que ingresó al Parlamento en enero de este año.

“El Gobierno debe darle suma urgencia al proyecto de agenda corta porque o si no pasan los meses y no se despacha, y seguimos con déficit en la legislación que sin duda contribuyen a los altos índices de impunidad que existen, particularmente en los robos con violencia y el tráfico de drogas en nuestro país”, apuntó.

Asimismo, el parlamentario RN agregó que la inseguridad “no se trata de una sensación de la ciudadanía provocada por los medios de comunicación. El 95% de los robos violentos que se investigan concluyen sin un condenado y por lo tanto, quedan en la impunidad los responsables, hay 66 mil órdenes de detención pendiente, y más de 1.600 puntos de tráfico de drogas”.

Por lo mismo, concluyó, “el deber de las autoridades es reaccionar más que comentar”.

Cabe recordar que el proyecto busca restringir el efecto de la aplicación de atenuantes en delitos en contra de la propiedad, como son los robos con violencia o intimidación, robos con fuerza en las cosas, hurtos, abigeatos y receptaciones. También aumentan las penas en caso de reincidencia de los delitos mencionados y en receptaciones superiores a las 400 UTM, entre otros.