El presidente gremial dijo que, “creo que después del fracaso constitucional anterior quedó claro que la región quiere un camino, no estamos esperando que alguien de afuera venga a decirnos cómo vivir aquí”.

“Un error que ha cometido la clase política en particular siempre ha sido el politizar temas de seguridad, siempre lo llevan a un campo desconectado de lo que sufre la gente en la realidad urbana y rural”.

Sobre el Estado de Excepción, “nosotros como gremio hemos pedido que pasemos del acotado al reforzado, pero evidentemente que si estamos discutiendo recién este tipo de leyes para que se defienda Carabineros es muy poco probable que nos tomen en cuenta la petición”.

Desde los temas agrícolas en la región hasta política y seguridad, fueron los elementos que el presidente de la Sofo, Roberto Heise, conversó con Tiempo21 en un año en el cual se ha tomado la agenda de seguridad ciudadana, donde la región no ha estado exento considerando que hay un Estado de Excepción que se renovó esta semana.

Terminó la cosecha de cereales, en especial en Malleco ¿Cómo califica este proceso, en cuanto a rendimiento y superficie sembrada, en comparación a otros años?

-Tengo la sensación, y creo que estuvo bastante bien acorde con los niveles de fertilización que se utilizaron el año pasado fueron menor que un año normal, por lo caro que estuvieron los fertilizantes. En ese sentido siento que la mayoría no apuntó al máximo potencial de rendimiento, pero si se logró por la primavera húmeda que tuvimos además de escasa de heladas. Entonces por eso creo que en ese sentido anduvo bien. No es lo mejor, pero fue bueno para el escenario que enfrentamos de incertidumbre fue el año pasado; si bien la superficie fue menos, pero se hizo evidente en situaciones de campos abandonados y de menor utilización con respecto a la cosecha.

La actividad agrícola de la región, es muy dependiente de la cosecha de trigo, avena y raps, pero es habitual que, al término de la cosecha, los insumos no tienen el mismo valor respecto a la siembra. ¿Cuál ha sido el impacto, en especial respecto a los combustibles y fertilizantes, la mayoría importados?

-En el tema agrícola tienes varias características especiales comparadas con otro tipo de mercados. Los productores agrícolas, nosotros somos aceptantes de precios, significa que, aunque queramos no podemos vender más caro de lo que nos pagan y no podemos comprar más barato lo que nos quieren vender. Los precios internacionales de los fertilizantes están muy indexados a los precios internacionales de los productos agrícolas. Y temas por ejemplo como de conmoción mundial como la pandemia, la invasión Rusia-Ucrania sin duda que afecta y son factores que no podemos controlar. Entonces en ese sentido, el negocio agrícola está bastante determinado por factores que no controla además del clima.

Los agricultores hoy, tienen la amenaza permanente de los atentados y los incendios forestales. ¿Cuáles son las perspectivas de siembra, próxima a comenzar?

-Los agricultores eso lo están resolviendo caso a caso, el año pasado teníamos adicional al tema comercial, teníamos la inestabilidad política por las campañas de la propuesta de nueva constitución, entonces había un clima adverso políticamente. Creo que este año podría estar un poco más despejado, independiente que estamos siguiendo un proceso constitucional nuevo, pero sin duda mucho más ordenado y acotado que lo que fue el año pasado.

Hubo una semana muy compleja en el Congreso en especial con la Ley Naín-Retamal que ya se aprobó (N. de la R: Fue promulgada) ¿Qué opinión tiene sobre esta ley al respecto?

-Absolutamente de acuerdo. Yo creo que la discusión, nosotros lo hemos dicho, un error que ha cometido la clase política en particular siempre ha sido el politizar temas de seguridad, siempre lo llevan a un campo desconectado de lo que sufre la gente en la realidad urbana y rural, tratan de ponerle nombre a situaciones que suenan bien ridículas como el “gatillo fácil” por ejemplo y es evidente que el “gatillo fácil” lo tienen los delincuentes.

Creo que hay tiempos para tener policías más pasivas, pero hoy lo que necesitamos es una policía muy activa, muy respaldada y tenga las herramientas necesarias para poder defender a la víctima y defenderse. Eso no debiese estar bajo ninguna duda, además estamos en un clima en que eso lo necesitamos, si estuviese todo con los indicadores de delincuencia bajos, la gente toda feliz y no sea un tema país como es el tema de la seguridad probablemente no estaríamos ni discutiendo, pero por algo es un tema, es una demanda de la ciudadanía, en La Araucanía desde mucho antes, sobre todo el tema de reforzamiento de la autoridad policial.

¿Qué le ha parecido cómo se ha llevado a cabo el Estado de Excepción en la región?

-Siempre se agradece el Estado de Excepción, hay bastante debate al respecto de la labor que cumple el Ejército y la Marina en este caso acompañando a Carabineros, pero es porque hay una institución que ha sido debilitada permanentemente que es Carabineros y ahora la forma más rápida de reforzarla es con el equipamiento y recursos que tienen las FF.AA, y son herramientas que existen en la Constitución y que sin duda tienen que usarse hasta que se logre el objetivo.

Ahora, esta versión que tenemos que es más acotada, con menos recursos que la primera que tuvimos con el gobierno anterior, sin duda tiene un resultado más acotado. Nosotros como gremio hemos pedido que pasemos del acotado al reforzado, pero evidentemente que si estamos discutiendo recién este tipo de leyes para que se defienda Carabineros es muy poco probable que nos tomen en cuenta la petición.

En la opinión pública existe inquietud por la permanente alza de precios en un alimento básico en la dieta chilena, el pan. ¿Existe una relación entre el precio del trigo nacional y el valor del pan, que justifiquen esas alzas en el pan?

-El componente de precios habría que entrar en el análisis de cuánto es gas, ver cómo está el precio de los combustibles para los hornos, la misma electricidad, el recurso humano que se ocupa para producir el pan. Hay correlación sin duda, si es el único factor, no; y todo está caro, el recurso humano está caro, los combustibles están caros, los fertilizantes están caros, y si todo eso sube, tiene que subir el pan.

Brasil ha destacado por su gran volumen de cosecha, en cambio Argentina ha bajado su producción, en especial de trigo, porque este país enfrenta serios problemas por el impacto de una prolongada sequía. Esta baja de producción de trigo de Argentina, ¿tendrá un impacto en el valor del trigo nacional?

-Siento que no, mucho trigo viene de Argentina, pero hay otras fuentes de importación que la sustituyen. Hay alternativas, creo que hace rato que Argentina no es una fuente confiable de aprovisionamiento y normalmente quienes importan trigo no lo tienen como su primera alternativa, lo digo por temas políticos, por temas de inestabilidad en el comercio exterior, problemas de tipo de cambio, no se toman tanto en cuenta como debiese ser a la hora de los precios; confiar en las producciones de ellos o en la disponibilidad de su producción. Creo que el mercado está bastante inserta la inseguridad del aprovisionamiento de algún producto desde Argentina, porque no están solamente los temas agronómicos o el tema climático, sino que están los temas políticos, monetarios, y finalmente son víctimas ellos mismos muchas veces, deberían ser un actor absolutamente predominante y yo creo que no lo son.

¿Qué evaluación hace del gobierno de Gabriel Boric cumplido un año sobre todo con el tema Araucanía?

Para nosotros en ese tema en particular, mal. La Araucanía ha pagado el proceso de aprendizaje, los golpes de realidad como ha salido en la prensa y que ha tenido el gobierno han sido brutales y mientras tanto nosotros seguimos soportando ese costo. Las primeras discusiones eran absolutamente en vano, palabras perdidas, no había ninguna toma de razón ni con todas las pruebas que se mostraban, al contrario, hay una desconfianza en los argumentos que se presentaban y finalmente de a poco se fueron volcando hacía las medidas que nosotros necesitábamos y las que se veían que funcionan. ¿malamente? ¿tienen que estar o no? Bueno, nuestra situación es ésta y es la que es no más.

Hay que seguir trabajando para mejorar en el tema de seguridad en todos los aspectos que ello conlleva, y la verdad es que no veo ningún avance diferente al aumentar los resguardos policiales. A ver, creo que después del fracaso constitucional anterior quedó claro que la región quiere un camino, no estamos esperando que alguien de afuera venga a decirnos cómo vivir aquí en La Araucanía. De eso yo creo que debió haber un golpe de realidad importante en gobierno en el sentido de que ellos idealizaron cosas que no son; si aquí finalmente en la región qué es lo que queremos, es conectividad, cobertura de telefonía celular, mantención de caminos (…) tener electricidad en los predios, APR, toda persona que quiera vivir tranquilo, sea mapuche, no mapuche, rural o donde sea, las necesidades son las mismas. Entonces ha habido políticas que han sido incongruentes, idealizadas, traídas de afuera y eso es lo que nos ha afectado, el componente del centralismo en las decisiones que han afectado en La Araucanía ha sido una causa importante de lo que nos ocurre.