Publicado por: Claudio Nuñez | sábado 23 de marzo de 2019 | Publicado a las: 13:40
Protección a cursos de agua y menocos, habilitación de senderos turísticos y construcción de secadores de leña, son algunas de las iniciativas que apoyará el Instituto de Desarrollo Agropecuario y la Corporación Nacional Forestal, tras la firma de un convenio de colaboración donde aportan con asesorías técnicas y financiamiento para familias de pequeños productores agrícolas y forestales.
La firma se realizó en el vivero de Nueva Imperial de Conaf y fue sellada por los directores regionales Carolina Meier y Julio Figueroa, quienes destacaron que la cooperación permitirá articular temas de restauración ambiental, producción no maderera del bosque y producción de madera para dendroenergía y agroforestería; y que para 2019 irá en directo beneficio de iniciativas en las que Indap aporta con 160 millones de pesos y Conaf con las asesorías especializadas.
“Hoy estamos firmando un convenio que se extenderá por dos años, en la cual Indap y Conaf apuestan por el desarrollo de los productores de La Araucanía, desde la experiencia de consultores y extensionistas junto con las inversiones que aportará Indap, para trabajar en los tres ejes establecidos: dendroenergía, para mejorar la calidad de la leña y tener una mejor comercialización de nuestros productores; potenciar los productos forestales no madereros, como el desarrollo del turismo y, por último, apoyar la restauración con los cuidados a los cursos de agua en sectores degradados”, manifestó Carolina Meier, directora de Indap Araucanía.
A su vez, el director de Conaf Araucanía, Julio Figueroa, recordó que el año pasado conoció la aplicación de este trabajo conjunto, en una iniciativa del sector Los Laureles en Carahue. “Estuvimos en un predio que fue dañado hace años por un incendio forestal en la zona costera alta de Carahue, donde el propietario nos demostró que, a través de este convenio, se habían recuperado vertientes para el consumo humano y para la producción agrícola, con la plantación de árboles nativos y habilitación de cercos alrededor del afluente, que fue un trabajo muy significativo para los productores que viven en la cordillera de la Costa”, acotó Figueroa.
Por último, para Dorka Sáez, representante de la Asociación Lemunefuén Ltda, que integran ocho productores agrícolas y recolectores de avellanas de Loncoche, contó que vieron que en el bosque nativo había un subproducto no maderero rentable. “Las avellanas se las llevaban otros en sacos y planteamos la idea de hacer nuestra propia recolección, justo en el momento que se estaba creando este convenio, así que obtuvimos asesoría técnica y financiamiento y con el paso de los años, hemos postulado además a un secador de leña y hornos de carbón, todas implementaciones para mejorar nuestros productos”, precisó la productora.