Algunas personas con frecuencia checan sus  teléfonos móviles. Una vez que se activa este impulso, puede ser más que una cuestión de no poder dejar de revisar el dispositivo. Los investigadores Henry Wilmer y Jason Chein de la Universidad de Temple, en los E.U.A., explican las razones por las que algunas personas están tan unidas a sus teléfonos inteligentes y la tecnología móvil, mientras que otros no tanto.

El estudio habla de cómo es necesaria una mejor comprensión acerca del impacto del uso de tecnología de teléfonos inteligentes y móviles para evaluar los posibles problemas asociados con el uso excesivo.

Aunque estos dispositivos electrónicos están desempeñando un papel cada vez más omnipresente en nuestras actividades diarias, poca investigación se ha hecho sobre una posible relación entre el comportamiento y los procesos mentales específicos que causa el uso de ellos. Por lo tanto, Wilmer y Chein se propusieron determinar si las personas que usan más la tecnología móvil también podrían tener diferentes tendencias a retrasar la gratificación, o a exhibir diferencias individuales en el control de los impulsos, así como a la hora de responder en diferentes escenarios.

«Los hábitos en la tecnología móvil, como la comprobación frecuente, parecen ser impulsos incontrolados y no por el deseo de perseguir recompensas», aseguró Wilmer.

«Los resultados son consistentes con la percepción común de que el uso de teléfonos inteligentes con frecuencia va de la mano con impaciencia e impulsividad.» Añadió Chein.