Para la psicóloga de la red de colegios Cognita, Vanessa Gálvez, la planificación familiar durante las vacaciones es fundamental, y eso no sólo incluye el lugar de destino, las tareas y los horarios que, pese a que pueden ser más flexibles, tienen que existir para la convivencia, sino que, además, “los papás y mamás deben regular el uso de las pantallas tal como lo han hecho todo el año. No nos olvidemos que nuestros niños y niñas tienen que continuar con hábitos de sueño saludables, al igual que el ejercicio físico, ambos factores de bienestar que se ven trastocados al momento de estar con más tiempo libre”.

En ese sentido, la especialista explica que “para lograr tiempo sin pantallas, es importante llegar a acuerdos determinados de uso, por ejemplo: sólo se utilizarán aparatos electrónicos dos horas al día, y distribuir éstas en la jornada de la mañana y la tarde”. Y es que, si bien el espacio digital es parte de los vínculos sociales y entregan diversión, su correcto uso es indispensable para que sea una experiencia positiva.

La psicóloga de Cognita comenta que la restricción total de pantallas no es la respuesta más idónea, y sugiere: “negocien con sus hijos e hijas el horario de uso de los aparatos electrónicos, conversen con ellos respecto a la importancia que tienen el estar en familia o en contacto con sus amigos, que la tecnología sea una aliada más que un factor de estrés o conflicto dentro de las familias”. En ese sentido, la especialista recalca la importancia de supervisar las páginas y juegos que visitan los niños, saber y conocer cómo los adolescentes interactúan con sus pares en redes sociales, y mantener un diálogo permanente sobre los riesgos de internet.

El desafío para los adultos es estar más actualizados en lo que ocurre en redes sociales y en los videojuegos y saber más que los niños y adolescentes de lo que pasa en el mundo digital, de esa manera serán un factor protector ante los riesgos a los que pueden exponerse.

Ideas para apagar las pantallas

Sin duda que en vacaciones de verano la creatividad se pone a prueba, pero es importante estar conscientes de que “los niños son sujetos en desarrollo, por lo tanto, cada experiencia, por simple que sea a los ojos de los adultos, será un aprendizaje significativo y un tiempo familiar imborrable para sus vidas”. Por eso, la psicóloga Vanessa Gálvez, de la red Cognita, con 14 colegios en todo Chile, entrega algunas ideas para jugar en familia y dejar las pantallas de lado por algún rato.

–          Cocinar en conjunto. A través de esta actividad descubrirán que preparar comida puede ser divertido y apreciarán mejor los platos que comen cada día. Además, podrán expresar su creatividad. Ideal hacer un asado con adolescentes.

–          Hacer manualidades. Desarrolla la imaginación y potencia la concentración, además de ayudar a la motricidad.

–          Juegos de antaño. El “ahorcado”, “veo veo”, el “gato”, “bachillerato” y “mímica de películas”, son actividades que antes se jugaban mucho y que podemos transmitirles y enseñarles.

–          Cantar Karaoke. Es ideal para que tomen contacto con la música y el canto y que a la vez se diviertan de una forma saludable en familia.

–          Leer. Escuchar cómo lees un cuento, por ejemplo, es beneficioso, ya que mejora la capacidad de escucha, la comprensión y ejercitará su potencial imaginativo.

–          Caminatas. Además de ejercitarse, es una maravillosa instancia para conversar y estar en contacto con la naturaleza.