Un paso más hacia la acreditación internacional dio la Universidad Autónoma de Chile. El año pasado el doctor Carlos Mijares, vicerrector académico del Instituto Tecnológico de Monterrey en México visitó la casa de estudios para entregar una visión crítica respecto de si la universidad cumplía o no con los requisitos para optar a ella y ahora, el doctor José Rafael López, director de Efectividad de la misma entidad mexicana, vino a exponer sobre cómo es el proceso y sus implicancias.

En un seminario al que asistieron autoridades corporativas y de la sede, además de los equipos de gestión de todas las facultades y carreras que imparte la Universidad en la capital regional, López explicó detalladamente cómo es el proceso que a ellos les ha valido estar acreditados desde el año 1950 a la fecha, especificando que es un camino de constantes mejoras y actualizaciones.

“Lo que quiero es compartir la experiencia que tenemos con las acreditaciones en Estados Unidos, porque si bien nosotros estamos acreditados desde 1950, cada diez años volvemos a hacer el proceso para reafirmarnos”, dijo López

El académico aclaró que para acreditarse internacionalmente lo esencial es tener la disposición para hacerlo y en este contexto valoró el interés de la Autónoma de Chile por avanzar en este ámbito.

Advirtió que la acreditación se da cada 10 años, “pero que en realidad es un proceso continuo que implica un seguimiento permanente para garantizar que los diferentes estándares de calidad se cumplan. O sea, más que un proceso por episodios de cada 10 años, es un compromiso con la mejora continua y con la calidad”, enfatizó.

En la oportunidad, el Dr. Juan Enrique Froemel, prorector de la Universidad Autónoma de Chile, destacó que desde hace unos meses la universidad está explorando la posibilidad de acreditarse en Estados Unidos.

Explicó que esto no reemplaza la acreditación en Chile, sino que es una acreditación distinta que va más bien orientada a mejorar los procesos de la universidad. “Lo que hace es permitirnos crear conciencia de la evaluación continua en la universidad, permitirnos saber lo bueno, lo malo y lo feo. En otras palabras, tener una mirada más crítica y menos de blanco y negro, de si está bien o está mal. La acreditación norteamericana es más bien un acompañamiento de la universidad en un proceso de mejoramiento continuo”, enfatizó.

Recordó que el año pasado estuvo acá el doctor Mijares y ahora lo hace el profesor López, ambos del Instituto Tecnológico de Monterrey, que es  una de las universidades más prestigiosas de México y de América Latina. “Ellos  han pasado acreditaciones con la misma agencia con la que nosotros queremos acreditarnos, por lo que vienen a contarnos cómo es el proceso, qué implica y a responder preguntas respecto de qué significaría a nosotros involucrarnos en esto”, concluyo la autoridad.