Así lo explican los ginecólogos que durante las vacaciones de verano, los hombres y las mujeres están más relajados, desean experimentar y disfrutar su sexualidad, por lo que se debe tener cuidado a la hora de tener sexo para evitar enfermedades y embarazos no deseados.

Se recomienda tomar precauciones, ya que los viajes o cambios de rutina propios de la temporada pueden generar olvidos o demoras en la toma de la píldora diaria pues un olvido lleva a la pérdida de efectividad del método anticonceptivo.

Se recomienda probar opciones anticonceptivas un par de meses antes de las vacaciones, pues existen alternativas hormonales efectivas como el parche cutáneo de uso semanal, la inyección anticonceptiva que se aplica cada tres meses o bien, el anillo anticonceptivo mensual, una opción fácil de usar que la mujer puede colocar dentro de la vagina al iniciar el ciclo, además de otros métodos de planificación familiar que pueden evitar enfermedades de trasmisión sexual.

Por ello,  es necesario que el paciente acuda al médico en busca de la información que lo ayudará a elegir la mejor alternativa de acuerdo con su estado de salud y su estilo de vida.