El bitcóin, la criptomoneda más popular del mercado, alcanzó un máximo de 103.844 dólares este jueves, consolidando un ascenso sostenido tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de noviembre. Aunque más tarde retrocedió a 100.626,72 dólares, la criptomoneda registra un aumento del 140 % en lo que va del año y un impresionante 45 % en las últimas cuatro semanas.

Regulación Pro-Cripto Impulsa el Mercado

La reciente subida está vinculada al nombramiento de Paul Atkins como candidato para presidir la Comisión de Bolsa y Valores (SEC). Atkins, reconocido por su enfoque favorable hacia los activos digitales, ha sido destacado por Trump como defensor de «mercados innovadores y robustos». Esta postura marca un contraste con la administración actual, liderada por Gary Gensler, quien ha aplicado una política más estricta hacia el sector cripto.

El cambio en la regulación proyecta un panorama optimista para las criptomonedas en EE.UU., especialmente con la promesa de políticas más liberales y favorables para el desarrollo del mercado.

Complemento al Oro y Auge de los ETFs

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), señaló que el bitcóin no representa una amenaza para monedas tradicionales como el dólar, sino que compite con el oro como activo refugio. Este comentario, junto con un aumento significativo en los flujos hacia fondos cotizados (ETF) de bitcóin, ha reforzado la confianza en el mercado.

Además, factores internacionales como la política monetaria expansiva en China y el inicio de la reducción de tasas de interés en EE.UU. han mejorado el atractivo de los activos de riesgo.

Un Mercado en Expansión

La plataforma Bit2Me destacó el optimismo creciente entre los inversores, mientras que Eric Demuth, CEO de Bitpanda, afirmó que la victoria de Trump elimina la incertidumbre sobre las criptomonedas y allana el camino para una regulación que incentive el desarrollo del sector.

Con esta dinámica, el bitcóin se consolida como un activo clave en la diversificación de portafolios, atrayendo flujos de inversión global y marcando un hito histórico al superar la barrera de los $100.000. La nueva era regulatoria en EE.UU. promete ser un catalizador para su crecimiento sostenido en los próximos años.