Cifras de desempleo de 2,8% en la región de los Lagos refleja una complicada realidad

La Región de Los Lagos no puede sacar cuentas alegres con las cifras de desempleo trimestre móvil diciembre 2014, enero y febrero 2015, resultados de la encuesta nacional del INE que fueron publicados, dejan a la región dentro de las tasas más baja del país con un 2,8%, o sea cerca de 11.890 personas se encontraron desocupadas.

Al mirar los resultados hay que tener en cuenta la siguiente máxima que se aplica en la encuesta desde abril del año 2010 “La población ocupada corresponde a las personas que trabajaron al menos una hora en alguna actividad económica durante la semana de referencia y recibieron un ingreso por ese trabajo” que totalizó a 414.400 personas”.

Es más, mirando los datos detalladamente, del total de ocupados 186.550 personas no poseen un contrato de trabajo, o sea un 45 % son trabajadores por cuenta propia, temporales, empleadores pequeños o profesionales que no cotizan en el sistema regular de seguridad social, lo que se constituye en trabajo precario.

Entonces, es ahí donde debiéramos poner las fichas como región en la protección y desarrollo de esa actividad económica, con políticas claras y participativas, con visión territorial y no seguir ahogando el trabajo de las familias campesinas y aquellas que viven del mar.

Los trabajadores asalariados en la Región de los Lagos con contrato de trabajo indefinido suma un total de 191.280 que corresponde sólo al 46% de los ocupados. De ese segmento 55 mil trabajan en el sector público con rentas promedios que superan los 500 mil pesos, mientras los restantes lo hacen en el sector privado con remuneraciones muy bajas que no superan los 435 mil pesos en promedio.

Otro aspecto que no incluyen las cifras de la encuesta nacional del INE sobre nuestra región es un dato que entregó el presidente de la Corte de Apelaciones en su cuenta anual, quien informó que en la zona hay más de 21 mil demandas por no pagos de cotizaciones previsionales a las AFPs, donde el gobierno regional no se ha pronunciado ni menos se observa interés en abordar esta compleja situación de vulnerabilidad laboral.

Por CUT LLANQUIHUE