Publicado por: DiarioTiempo21 | viernes 15 de julio de 2016 | Publicado a las: 08:10
Richard Quintana Valdebenito es un trabajador social y Licenciado en Trabajo Social de la Universidad Católica de Temuco, magíster en Gerencia Social de la Universidad de La Frontera. Desde el año 2008 que está ligado al ámbito de la planificación y ejecución de políticas públicas, emprendimiento y desarrollo regional; desempeñando distintos cargos como seremi de Trabajo y miembro de la Comisión Regional de Empleo y de la Mesa Regional de Capital Humano en el periodo 2008-2010. Pero también ha estado en el área privada, cuando fue consultor externo para la OIT en Estudio de Empleo el 2010 y ha sido coordinador de distintos proyectos de emprendimiento social y productivo. En su labor académica, registra su docencia de nivel superior en IP Santo Tomas en las áreas de políticas públicas, planificación de proyectos, emprendimiento y liderazgo, además de ser consultor de proyectos, y asesor ad-honorem para distintas organizaciones sociales y sindicales.
Desde marzo de 2014, el militante del Partido Socialista fue señalado por el nuevo gobierno de la presidenta Bachelet como director regional de Sernatur y por ello le consultamos acerca del presente y futuro de esta actividad económica, que en 20 años ha ido ganando grandes espacios, especialmente en el mundo campesino, porque ahora las familias rurales han visto que visitantes del país y el extranjero también le interesa conocer la vida campesina, espacios naturales alejados de las grandes urbes y de las ciudades turísticas repletas de gente y ruido.
Impacto económico
Cuando se habla del desarrollo económico regional, en los últimos 20 años se ha trabajado mucho en el turismo ¿cuál es el impacto económico para la región?
-Me tocó participar en el gabinete como Seremi el 2008, y ya se había declarado el turismo como uno de los ejes productivos priorizados a partir del diseño de la Estrategia Regional de Desarrollo, ahora hay también a mi juicio otros elementos detonantes como el trabajo de articulación publico privado, en el marco del programa Chile Emprende, que en distintos territorios generó una sinergia y una red que me parece que es la base sobre la cual hoy seguimos trabajando, con cambios y matices y con una estructura clara. Así también el gobierno anterior se atrevió a
invertir en promoción turística, y el actual, junto con fortalecer ello, también a dispuesto instrumentos como los programas estratégicos de especialización inteligente de Corfo, que en ésta Región han puesto foco en el turismo, es decir en términos de instrumentos y productos hay una inversión y una apuesta consistente. Respecto del impacto, creo que hay varios elementos, y no contamos con todos los indicadores al 100% de confianza para medir dicho impacto, pero estamos hablando de un total de 452.000 llegadas como promedio entre 2014 y 2015, con una clara tendencia al alza para este año 2016, que registra 11% más de llegadas al comparar las cifras correspondientes al cuatrimestre enero-abril de los años 2014 y 2015, a un gasto promedio diario de U$ 319. También hablamos de que el monitoreo que el INE hace del empleo, sólo en hoteles y restaurantes, considera un total de más 20 mil ocupados, eso sin contar la tour operación, transporte turístico y el uso de servicios complementarios y del comercio, estudios indican que por un empleo generado en el turismo el impacto se extiende a 3 o 4 indirectos, eso para nuestra Región es altamente sensible. Personalmente creo que pobreza y empleo son los dos indicadores que nos deben desvelar.
Pese a los esfuerzos, el desarrollo turístico regional aun está muy marcado por la temporada veraniega ¿qué esfuerzos habría que realizar para poner más equilibrio entre la temporada invernal y el verano?
-Creo que no hay ningún destino que no tenga una marcada estacionalidad, veamos lo que pasa en Viña del Mar, La Serena y muchos internacionales. Pero ojo con lo que hacemos en La Araucanía, primero estamos ya ante una segunda temporada alta en invierno, en la mayoría de los destinos, por ejemplo la tasa de ocupación de Araucanía Andina, en invierno 2015 es de más de un 60% -medición mediante encuesta telefónica de Sernatur-, lo cual es muy importante, pero además estamos marcando campañas por temporada, estamos haciendo una estrategia con
municipios y cámaras para estimular el turismo interno en fiestas patrias, hemos lanzado la temporada de otoño, poniendo en valor nuestros parques nacionales y apoyando acciones de comunas y destinos como Melipeuco, Curacautín y Nahuelbuta, que en dicha época del año tienen mucho para ofrecer, además del mes de las termas en agosto y lanzar la temporada de invierno en Concepción, entre otros. Bueno debemos seguir diversificando, y resaltando las actividades que podemos hacer durante todo el año.
Aun hay informalidad
Mucho se trabaja por el desarrollo del turismo rural y vemos cómo sectores campesinos se han volcado hacia este sector en el último tiempo ¿qué ha significado para el mundo rural el turismo?
-Gran parte de nuestros emprendimientos están en zonas rurales, en localidades urbanas y rurales, y ello genera desafíos y complejidades distintas, que muchas veces demoran los procesos de formalización, pues hay brechas más marcadas en conectividad, comunicaciones, e incluso acceso al agua potable, dependiendo de la lejanía por ejemplo. El diagnóstico del Programa Estratégico de Turismo para la Costa y Nahuelbuta señaló que había cerca de un 50% de emprendimientos informales, por diversas razones y por ello, la acción del programa y articulación con Sercotec y la Agencia de Desarrollo, por ejemplo, están haciendo la diferencia y ayudando a superar dichas brechas. Aun así, pese a las dificultades tenemos experiencias destacadas en la costa, en las cuales las comunidades con el turismo, hoy triplican el ingreso económico que obtienen por medio de la agricultura familiar campesina, y en algunos casos les ha permitido comercializar sus productos y agregar valor, son actividades muy compatibles y que debemos hacer que dialoguen. Creo que los distintos programas públicos, han permitido detectar brechas articular actores y aportar conocimiento para mejorar y acompañar el desarrollo de los emprendimientos,
ahora bien siempre se puede hacer más en materia de articulación público privada y pública-pública, de manera de aportamos una mirada o bajada cada vez más articulada a los territorios, pero a veces nos come la máquina, la agenda institucional, y las estrategias en algunos casos un tanto centralistas de algunos servicios.
En el tema laboral ¿cuál es el impacto para la creación de plazas de trabajo en esta actividad?
-Esto lo he señalado en términos generales en función de los datos INE que manejando, pero haciendo la salvedad de que hay segmentos y actividades respecto de los cuales no tenemos datos desagregados, sin embargo, hay estudios que indican que por un empleo director son 3 o 4 indirectos. De todas formas hay un análisis importante que hacer en materia de territorios, pues en la zonas como Araucanía Andina se habla por parte de las organizaciones gremiales de 2 mil empleos solo en el eje Curacautín- Malalcahuello, lo cual sin duda es un indicador de la capacidad que tiene la industria para sostener económica y socialmente un territorio, y en destinos como lacustre es mucho más decidor aún, es cierto que hay industrias que generan más dólares e ingresos, pero el factor empleo, a mi juicio debería preocuparnos más por sus impactos económicos y sociales.
Una de las dificultades para el desarrollo del turismo rural, es la infraestructura caminera. Se habla a largo plazo de la doble vía Freire Pucón pero también se reclama inversión en otros sectores
-Vienen varias buenas noticias, por ejemplo la ruta Tirúa- Tranapuente, nos va a permitir tener una segunda ruta escénica, con identidad y dar columna a un territorio de turismo mapuche y turismo rural muy potente entre nuestras regiones de La Araucanía y Los Ríos, así también, el camino a laguna Captren, entre otros caminos que son parte de la agenda del MOP, son noticias positivas que van a entregar condiciones habilitantes para poder hacer turismo e integrar a las comunidades al desarrollo económico.