La tasa de desocupación fue de 7,9%, registrando un aumento de 0,2 pp. en doce meses debido al crecimiento, en menor proporción, de las personas ocupadas (3,8%) respecto al aumento de la fuerza de trabajo (4,0%).

Por su parte, las personas desocupadas tuvieron un aumento de 6,9%.
Las personas ocupadas crecieron 3,8% en doce meses, equivalente a 15.179 personas más, siendo incidida por las mujeres (6,2%) y en menor cuantía por los hombres (2,0%).

Según sector económico, la expansión de la población ocupada (3,8%) fue influida principalmente por enseñanza (21,8%), administración pública (24,0%) y comercio (6,8%), en tanto, las principales categorías ocupacionales que mostraron alza fueron personas trabajadoras por cuenta propia (9,4%) y personas asalariadas formales (4,0%).

La tasa de ocupación informal fue de 35,5%, registrando un alza de 0,3 pp., producto del aumento de personas ocupadas informales (4,7%), en mayor proporción, respecto del aumento del total de personas ocupadas (3,8%).