Publicado por: Claudio Nuñez | domingo 31 de julio de 2022 | Publicado a las: 11:56
El ex CC aseveró que “en el texto hay vacíos que es necesario llenar, como incorporar el estado de emergencia entre los estados de excepción constitucional”, afirmando que la propuesta de Carta Magna es “perfectible”.
“No es que le sobren artículos, sino que no hubo la posibilidad de haber hecho una labor de concentración del texto y de una mejor sistematización. El plazo para entregar el texto conspiró contra ello”, indicó.
Además respondió a Javier Couso, profesor de derecho de la UDP, “es el Art. 191.2 que habla de consentimiento previo, pero es distinto al Convenio 169 y con el propio Art. 66, que contempla la consulta, y no el consentimiento, como un derecho.
Por Diario Tiempo 21
Fue un año de trabajo arduo, intenso. Pero el objetivo se logró: Chile ya tiene una propuesta de Nueva Constitución, que será aprobada o rechazada en el Plebiscito del próximo 4 de septiembre. Como ex Constituyente, el abogado Eduardo Castillo sigue con una training fuerte. Ahora dedica sus días a participar en foros, paneles, entrevistas, encuentros con la ciudadanía, todo para informar, para darla a conocer su contenido y alcances.
En esa tarea, contesta a Tiempo 21. Lo hace con claridad y énfasis, como asumiendo su rol de profesor de derecho constitucional y, sobre todo, para cumplir uno de los objetivos que se impuso cuando decidió postular como constituyente: ayudar a cambiar la Constitución del 80, que enseñó durante tantos años sabiendo que no lo representaba, ni por su contenido y menos por su origen, en plena Dictadura.
Acá las razones de Eduardo Castillo para el Apruebo. Y también su convicción de que la propuesta es perfectible, escenario que ve más probable en el caso de que el texto sea aprobado.
En relación al sistema de justicia que la propuesta de la NC ofrece, ¿qué le parece el punto del “Consejo de Justicia”? Hay críticas en relación a la conformación de esta porque, tal como los cuoteos, se podría “politizar”.
No hay nada más político que lo que existe hoy día, donde el Senado da su acuerdo al Presidente de la República para que nombre a los Ministros de la Corte Suprema. Este acuerdo debe ser por los 2/3 de los integrantes del Senado de manera que todo tiene que ser acordado (o cuoteado como dice la pregunta) entre el gobierno y la oposición. En cambio, en el Consejo de la Justicia, diez de sus miembros son integrantes del Poder Judicial (ocho jueces y dos funcionarios o profesionales). De los otros siete integrantes – minoría – cinco son elegidos por el Poder Legislativo (Congreso de Diputados y Diputadas y la Cámara de las Regiones en sesión conjunta) y otros dos se elegirán conforme lo determine la ley. Es decir, pierde su relevancia el ente político que es el parlamento.
De acuerdo a su apreciación, en caso de ganar el Apruebo como opción para el plebiscito ¿Es necesario que se puedan reformar algunos artículos de la posible nueva Carta Magna? ¿Cuáles serían a su juicio?
Con el Apruebo tendremos un texto que responde a las necesidades actuales y a partir de ahí hacer las reformas necesarias. En el texto hay vacíos que es necesario llenar, como incorporar el estado de emergencia entre los estados de excepción constitucional; contemplar las bases del sistema de partidos políticos y del sistema electoral para asegurar la gobernabilidad y estabilidad democráticas; agregar la propiedad industrial en el derecho de propiedad. Entre las modificaciones sería partidario de eliminar el referéndum ratificatorio en las reformas constitucionales pero mantenerlo en las normas transitorias por lo que los agregados y modificaciones que se hagan antes del 11 de marzo de 2026 sean sometidas al voto popular. Soy partidario que la Cámara de las Regiones se llamara Senado de las Regiones para resaltar su fuerza representativa en el núcleo del poder central.
Respecto al texto, ¿le sobran artículos a la propuesta de NC?
No es que le sobren artículos, sino que no hubo la posibilidad de haber hecho una labor de concentración del texto y de una mejor sistematización. El plazo para entregar el texto conspiró contra ello.
El ex Presidente Lagos dijo que una “una Constitución no puede ser partisana”. ¿Cómo califica la intervención del ex Mandatario, que firmó una reforma a la Constitución de Pinochet, hasta dónde se lo permitió la derecha?
La considero adecuada porque llama a pensar en el día 5 de septiembre; una mirada que va más allá de la decisión plebiscitaria. Y en ese sentido creo que le puso tarea al mundo político, es decir, si gana el apruebo ¿hay acuerdo acerca de cuáles son las mejoras que se harán?. Y si gana el rechazo ¿cuál es el nuevo proyecto que ofrecerán a Chile?. Y eso es materia de acuerdos en lo que veo mucho más consenso en los sectores del apruebo. En el rechazo hay solo generalidades porque no hay condiciones para acuerdos, por ejemplo, entre republicanos y amarillos, pasando por la UDI, RN y Evópoli.
Un triunfo del ‘Rechazo’ no solo significa seguir con la Constitución de Pinochet, sino que vuelve a colocar a la derecha con plenos poderes sobre el futuro del país. ¿Usted cree que quienes apoyen la opción rechazo estarán dispuestos a aceptar cambios profundos a la Constitución del 80?
Creo que uno de los consensos a que ha llegado la derecha es que ya no es posible defender ni mantener la Constitución del 80. Considerando su conducta histórica eso es un avance pero no sabemos nada de lo que propondrán a cambio.
Javier Couso, profesor de Derecho Público de la UDP, señala que la falta de regulación del sistema electoral es uno de los puntos claves a resolver y cuestiona que no quedó resuelta la incongruencia entre consulta y consentimiento indígena. ¿Qué opina al respecto”?
Ya me pronuncié en cuanto al sistema electoral. En cuanto al segundo tema, es el Art. 191.2 que habla de consentimiento previo, pero es distinto al Convenio 169 (que en virtud del Art. 15 es parte de la Nueva Constitución) y con el propio Art. 66, que contempla la consulta, y no el consentimiento, como un derecho. La ubicación de esa norma en el ámbito de la participación en las entidades territoriales da lugar a una interpretación acotada a esos ámbitos; esa es mi opinión. Ciertamente es un punto abierto. Cuando entra en vigencia cualquier nueva constitución comienza una prolífica labor de la Corte Constitucional, o como se le llame, porque quedan muchas cuestiones dudosas que van a ser objeto de interpretación como contradicciones entre normas del mismo texto constitucional o contradicciones entre las leyes vigentes y la nueva Constitución.
¿Qué opina de los medios de comunicación tradicionales del país, su amplia cobertura a la opción rechazo y que han estado muy débiles frente a la aparición de fake news o noticias falsas?
Sobre los medios de comunicación es impresionante como algunos de ellos hablan del texto propuesto desde los temores, desde los miedos. No es nuevo. Lo de las fake news opino que los que estamos por el Apruebo nos dediquemos a difundir y exponer lo que dice el texto y no distraernos con la música que coloca el Rechazo. A los indecisos decirles, que lean, que se informen, que pregunten, que no se queden con titulares o lo que dicen las redes sociales. La tarea de quienes estamos por el Apruebo es dedicar nuestros esfuerzos para que la información llegue a todos y todas; es la desinformación la que puede jugarnos en contra. Nosotros sabemos que esta Nueva Constitución en buena para Chile, para que haya derechos sociales garantizados y una mirada acorde a los tiempos en temas tan importante como paridad, pueblos indígenas, disidencias, medio ambiente y tantos otros que nos llevarán a construir un país mejor.