Publicado por: Claudio Nuñez | jueves 22 de septiembre de 2016 | Publicado a las: 14:12
Sernageomin, Conaf, Onemi y Sernatur llamaron a los turistas nacionales y extranjeros a “disfrutar de la belleza escénica de los volcanes sin arriesgar la vida ni la integridad corporal”. Lo anterior, a propósito de los 13 accidentes turísticos registrados desde el año 2010 hasta hoy en los volcanes Antuco, Calbuco, Callaqui, Lanín, Lonquimay, Ojos del Salado, Osorno, Tronador, Villarrica y recientemente el Puntiagudo. Al respecto, las autoridades definieron tres pautas básicas de seguridad para acercarse a volcanes: 1) Avisar previamente a Carabineros, 2) disponer de sistema de telecomunicación y equipamiento adecuado, 3) informarse sobre el pronóstico del tiempo y la situación energética del volcán.
El Director Nacional del Sernageomin, Rodrigo Álvarez Seguel, dijo “a nuestro modo de ver, disfrutar los servicios ambientales de los volcanes y hacerlo con inteligencia son dos cosas compatibles. El tema es que muchas veces se ven conductas temerarias, por ejemplo al tomar una ‘selfie’ junto a un cráter con radio de restricción, saltar en ‘bungee’ o paracaídas desde helicópteros sin considerar la advertencia de emisión de partículas volcánicas, el calor o una situación de inestabilidad energética. Se ha avanzado sobre el monitoreo instrumental y los mapas de peligros publicados para reducir el riesgo de la población. Por eso es un contrasentido que el objetivo de este desarrollo técnico se vea afectado por conductas desprevenidas. Lo adecuado es tomar medidas básicas y actuar informado”.
Cabe señalar que el Sernageomin ha fijado radios de restricción para 4 volcanes: Villarrica (500 metros), Planchón-Peteora (1 kilómetro), Copahue (1 kilómetro y medio) y Nevados de Chillán (3 kilómetros).
El Director Ejecutivo de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Aarón Cavieres, afirmó que “de los 90 volcanes activos presentes en Chile, 32 se encuentran al interior del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE), por lo que suelen ser los más visitados por los turistas. Se trata de volcanes con gran valor para el patrimonio geológico del país, y por lo tanto es positivo que la población los conozca, pero igualmente es necesario respetar las instrucciones de los guardaparques”.
El Director Nacional (S) de ONEMI, Víctor Orellana, declaró que “el Estado está realizando importantes esfuerzos tanto en preparación como en respuesta para enfrentar los desastres de forma integral. En el caso de los volcanes se ha hecho un importante trabajo con las comunidades de las zonas aledañas, para que sepan qué hacer y dónde evacuar en caso de ser necesario. En esta labor también se ha incorporado a los operadores del sector turístico. Acá lo fundamental es el autocuidado y la responsabilidad en donde la población en general, y los turistas en particular, juegan un rol fundamental”.
Por su parte, la Directora Nacional del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur), Marcela Cabezas, comentó que “el país es distinguido a nivel mundial por su patrimonio paisajístico de alta montaña, lo que en el caso de los volcanes genera un atractivo adicional. La idea es potenciar este atractivo, pero aprovechar estos recursos turísticos sin arriesgar la vida ni la integridad física, considerando las recomendaciones de los organismos técnicos”.
En línea con esta medida, la Subsecretaría de Turismo está desarrollando un Plan Integral Nacional de Seguridad Turística, desde julio de 2015, que consideró, en una primera etapa, el diseño de acciones relacionadas con riegos de desastres. Para ello, se constituyó la Mesa de Seguridad Turística con representantes de la Subsecretaría de Turismo, ONEMI, Sernatur, Fedetur, la Asociación Chilena de Empresarios Turísticos, Achet, la Cámara Nacional de Comercio, CNC y Chilesertur.
Desde el año 2010 se han registrado al menos 13 accidentes en volcanes del país, en los cuales murieron 6 chilenos y 6 extranjeros (3 franceses, 1 mexicano, 1 españoles y 1 argentino).
En Sudamérica, los volcanes activos se encuentran en el llamado “Arco Volcánico”, franja que recorre la Cordillera de Los Andes, y que existe como secuela de la subducción de la placa tectónica de Nazca debajo de la placa Sudamericana. En Chile, los volcanes activos de mayor peligro son monitoreados por la Red Nacional de Vigilancia Volcánica que administra el Sernageomin.