Publicado por: Claudio Nuñez | jueves 6 de septiembre de 2018 | Publicado a las: 11:12
La primavera se acerca y los alérgicos ya están notando las consecuencias del cambio de estación en su sistema inmunológico. Los ojos y la nariz son los órganos más sensibles a los alérgenos propios de esta época como el polen o el polvo, pero el oído también forma parte de los perjudicados.
Gloria Sanguinetti fonoaudióloga de Centros Auditivos GAES, comenta que las vías respiratorias se inflaman a la vez que aumenta la cantidad de mucosidad favoreciendo un caldo de cultivo para sufrir una otitis. La función de las trompas de Eustaquio (el conducto que comunica la cavidad bucal con el oído) es equilibrar la presión dentro del oído medio para proteger el tímpano si estas se obstruyen, lo primero que se produce es una sensación de taponamiento desembocando en una otitis.
En el proceso de congestión alérgica aumenta también considerablemente la frecuencia de los estornudos. Estos llevan consigo un cambio de presión en los oídos, si se reprimen o se expulsan de modo exagerado pueden llegar a provocar fístulas laberínticas que repercuten en la capacidad auditiva.
Aunque no se trata de algo doloroso, sí es molesto. Esta situación es más frecuente entre los niños ya que en ellos las trompas de Eustaquio aún no están desarrolladas completamente. Como los niños no suelen quejarse de un oído tapado, habrá que detectarlo observando su comportamiento “Suben el volumen de la televisión y otros dispositivos, no contestan cuando se les llama o dejan de poner atención en clase” afirma Gloria Sanguinetti.
Lo normal es que estos episodios de oídos tapados desaparezcan por sí solos. No obstante los padres deben estar atentos ya que si la mucosidad que llega al oído, procedente de la nariz o del propio oído, no se elimina, puede llegar a inflamar el oído medio ocasionando dolor y supuraciones ocasionando una otitis media. Cuando la situación persiste o hay dolor en los oídos, lo aconsejable es visitar al médico.
¿Qué precauciones tomar con las alergias?
Es esencial que ante el primer síntoma de hipersensibilidad a algún agente externo se acuda al especialista para no agravar más la situación. Se recomienda reducir las actividades al aire libre, llevar a cabo una limpieza adecuada del hogar y del entorno de trabajo y no secar la ropa en el exterior para evitar poner nuestra salud en riesgo.