Con una rotunda ovación del respetable que acudió al Aula Magna Monseñor Jorge Hourton de la Universidad Católica de Temuco, se homenajeó a los icónicos emblemas del teatro nacional Alejandro Sieveking (dramaturgo) y Bélgica Castro (actriz), quienes lamentablemente desde marzo de 2020 fallecieron en un hecho que impacto que coló de lleno al mundo artístico chileno. El sentido acto, fue desarrollado por la Compañía de Teatro de la UCT, quienes presentaron uno de los tantos clásicos teatrales creado por Sieveking en la década del 60, La Remolienda.

La exhibición, en esta oportunidad estuvo dirigida por la destacada actriz y directora regional, Sandra Meezs, e interpretada por un celebre grupo de profesionales de las artes escénicas provenientes de la casa de estudios.

La obra que se extendió por más de 90 minutos, mezcló la historia de una madre y sus tres hijos de visita por primera vez la ciudad, oportunidad donde se ven sorprendidos por conocer el pavimento, la civilización y la luz eléctrica. Luego, ocurrieron diversos hechos que mezclaron la comedia con el drama, lo que sin duda sacó varias carcajadas en los presentes, quienes tuvieron una gran conexión con los artistas.

Es importante resaltar, que La Remolienda es una obra estrenada durante 1965, creada por el Premio Municipal de Literatura de Santiago en 1960 y Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales de Chile, Alejandro Sieveking, quien en compañía de su esposa Bélgica Castro (Premio Nacional de Artes de la Representación de Chile en 1995) representaron dicha obra en múltiples escenarios durante muchas décadas, quienes fallecieron un 5 y 6 de marzo de 2020 respectivamente.

Un sentido homenaje

Tras el fin de la muestra teatral Meezs no pudo esconder su emoción, ya que aseguró que el teatro regional le debía una despedida a ambos icónos chilenos, la que no se pudo dar producto de la pandemia del Covid-19. “Esto es un homenaje que le debíamos a Alejandro y Bélgica y la energía que se generó con el público fue muy buena, así que estoy muy feliz y agradecida por lo logrado. Debo decir que tuve susto de que no tuviésemos mucha gente ya que todavía existe temor por el covid, pero tuvimos una sala bastante llena, además, el público respondió de manera espectacular” señaló.

Por su parte la actriz de la Compañía Teatral de la UCT, Sheila Malatesta, agregó que “yo creo que hablo a nombre de todas y todos que estamos emocionados hasta las lágrimas. Ha sido un remolino de sensaciones y estamos culminando un trabajo de todo un año y por eso estamos (sic) muy felices y satisfechos”.

De parte de los espectadores, Ruth Arias, señaló que es muy bueno que el teatro vuelva a los escenarios, “esta obra me pareció muy buena, los actores hicieron un muy buen trabajo. También noté que vino mucho público, por lo general nosotros siempre vamos a ver muchas obras de teatro con mis hijos, así que estamos contentos por esta obra”.

Finalmente, Belén Castillo, agregó que es fundamental potenciar tanto el teatro, el arte y la cultura en Temuco. “Fue una obra muy fácil de llevar, apta para cualquier tipo de público y fue muy emocionante ver lo que transmitían los actores, siento que traspasó genuinamente el escenario. También, siento que había mucha conexión y el público estuvo muy atento y reaccionó en los momentos justos”, cerró.