lunes | 25 de noviembre | 2024

inicio Política Diputado Sebastián Álvarez: “La Hidroeléctrica Los Aromos era una amenaza para la...
Política

Diputado Sebastián Álvarez: “La Hidroeléctrica Los Aromos era una amenaza para la comunidad”

Publicado por: Claudio Nuñez | viernes 23 de agosto de 2019 | Publicado a las: 20:35

Compartir esta noticia

“Aquellos proyectos que no cumplen y que no resguardan de verdad el respeto a las comunidades locales y al tema medioambiental, no se pueden aprobar”.

“En ambos casos (Llancalil y Los Aromos) son proyectos que deben tener parámetros muy altos para instalarse en La Araucanía, porque esta es una zona muy particular, el llamado a las empresas es a ser muy minuciosos”.

“Este es un triunfo que demuestra que cuando los servicios públicos trabajan en forma seria, responsable, bien informados, con seguimientos de principio a fin, se pueden argumentar las decisiones”.

Diario Tiempo21 Araucanía

Para el diputado Sebastián Álvarez Ramírez (Evópoli) la jornada que se vivió el lunes en la Intendencia fue histórica. Por ocho voto a tres los seremis de la región votaron en contra del proyecto de la Central Hidroeléctrica Los Aromos, que pretendía instalarse en el río Toltén.

La central, que iba a intervenir 112 hectáreas cerca de la junta de los ríos Allipén y Toltén para generar 119 megawatts de energía eléctrica, pertenece a una empresa española e iba a significar una inversión de 91 millones de dólares.

El parlamentario fue uno de los primeros en manifestar su rechazo al proyecto hidroeléctrico por considerar que era más el impacto que el beneficio. De esta forma el legislador se sumó a miles de personas que se movilizaron a través de las redes sociales, y que incluso, se tomaron la ruta hacia Villarrica para protestar.

El diputado Sebastián Álvarez explica por qué algunas comunidades están en contra de los proyectos de centrales hidroeléctricas, cuál es la deuda que se tiene en esta materia y cuál es el camino que se debe tomar.

¿Cuál era su sensación antes de la votación de la Hidroeléctrica Los Aromos?

– Lógicamente que en todo proceso de Evaluación de Impacto Ambiental existen observaciones que durante el proceso deben ser subsanadas por la empresa interesada en llevar adelante el proyecto. Sin embargo, de acuerdo a lo que se pudo observar en la reunión, hubo muchas observaciones durante el proceso que la empresa no había respondido satisfactoriamente.

¿Cómo cuáles?

–En los antecedentes había algunos puntos establecidos en la consulta indígena con los cuales no se había llegado a acuerdo con las comunidades afectadas. A esto se suman algunas observaciones de carteras como Medio Ambiente y Economía, que no habían sido respondidas de buena manera por la empresa. Por lo tanto, esto generaba una sana aspiración de parte de la comunidad que este proyecto fuera aprobado, porque no se había respondido a cabalidad todas las observaciones realizadas.

¿Cuál es la señal que se busca dar?

–Aquellos proyectos que no cumplen y que no resguardan de verdad el respeto a las comunidades locales y al tema medioambiental, no se pueden aprobar. Estamos contentos porque creemos que aquí la institucionalidad cumplió un rol, que dio como resultado el rechazo de este proyecto.

Usted se opuso a Llancalil y ahora a Los Aromos ¿Se va a oponer a todos los proyectos de Centrales Hidroeléctricas que se quieren instalar en la región?

–La oposición se funda en aquellos proyectos que no dan respuesta a las observaciones que tiene tanto en los servicios como la comunidad. Ambas centrales son casos distintos. En Llancalil mi principal observación es que en una Zona de Interés Turístico (Zoit), no se haya solicitado un Estudio de Impacto Ambiental a un proyecto que genera una afectación medioambiental y del punto de vista del desarrollo productivo, el respeto a las comunidades locales, principalmente mapuches. El proyecto Llancalil en ninguna parte informa de cómo se hará la transmisión desde el punto de generación al Sistema Interconectado Central, por lo tanto deja una incertidumbre muy grande y correspondía hacer un Estudio de Impacto Ambiental y no sólo una declaratorio.

Y en el caso de la Hidroeléctrica Los Aromos ¿Por qué se opuso?

–En el caso de Los Aromos sí se hizo un Estudio de Impacto Ambiental, sin embargo, la empresa no respondió todas las observaciones realizadas por los servicios y las comunidades mapuches de la cuenca del Toltén. En ambos casos (Llancalil y Los Aromos) son proyectos que deben tener parámetros muy altos para instalarse en La Araucanía, porque esta es una zona muy particular, el llamado a las empresas es a ser muy minuciosos.

¿La votación del lunes lo asume como un triunfo personal?

–No. Aquí no podemos hablar de triunfos personales. Aquí lo primero es destacar que es un triunfo de la institucionalidad en nuestro país, de la que siempre he sido muy crítico. Hoy estamos modificando el sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. Este es un triunfo que demuestra que cuando los servicios públicos trabajan en forma seria, responsable, bien informados, con seguimientos de principio a fin, se pueden argumentar las decisiones. Y este también es un triunfo de la comunidad respecto a que se puede protestar en forma pacífica y manifestar el malestar que provoca cuando los proyectos se arman sin tener vinculación con las personas que habitan el territorio. Esto también es un triunfo de la coherencia que debe tener esta región y que se traduce en el Plan Impulso, donde se establece que un polo de desarrollo importante para La Araucanía es el turismo, en el caso puntual del río Toltén donde se hace pesca recreativa y hay cientos de familias que se dedican a esto.

¿Se está en deuda con el río Toltén?

–Yo en términos generales creo que existe una deuda con la cuenca del río Toltén. Creo que hoy, más que pensar en un embarcadero o en un parque fluvial, tenemos que hablar sobre cómo podemos establecer una Zona de Interés Turístico (Zoit), estableciendo un polígono en todo lo que es la cuenca, creo que hay una deuda de planificación y ordenamiento territorial respecto a cuidar y resguardar nuestros ríos. En particular en Toltén existe una deuda mayor porque allí se hace extracción de áridos legal e ilegal. Otra de las deudas es con el inicio de la cuenca del Toltén, porque Curarrehue no tiene Planta de Tratamientos de Aguas Servidas, lo que se traduce en una contaminación del lago Villarrica, la que finalmente también llega al Toltén. Siento que las deudas que tenemos no pasan por hacer un parque fluvial, pasan porque hoy no tenemos una planificación territorial de cuencas en el país.

¿Qué cambios se están haciendo en el Sistema de Evaluación Ambiental?

–La modificación al Sistema de Evaluación Ambiental hoy tiene 102 indicaciones. Voy a mencionar las que considero son de mayor interés. Elevar el estándar, que el Sistema de Evaluación Ambiental esté a la altura de los tiempos, hoy estamos enfrentando una emergencia ambiental, el Cambio Climático no es que venga, lo estamos viviendo. Tenemos una gran carencia de recursos hídricos, lo que puede generar un gran daño al desarrollo sustentable de la humanidad. Otra de las modificaciones es que ante estos proyectos debe existir una participación vinculante de la comunidad. Que en el Coeva regional tenga participación un representante del Consejo Comunal de la Sociedad Civil (Cosoc) de la comuna donde el proyecto se insertará. Puede ser el alcalde o un representante que el Cosoc determine. Lo tercero es que en todas las Zonas de Interés Turístico se exija siempre un Estudio de Impacto Ambiental. Y que se prohíba por ley la entrega de incentivos económicos de las empresas a las comunidades antes, durante y después de un proceso de Evaluación Ambiental, porque eso, hemos podido ver, divide a la comunidad y se traduce en un incentivo perverso.

Diputado ¿Qué significaba la Central Hidroeléctrica Los Aromos para las comunidades que viven en el entorno al río Toltén?

–La Central Los Aromos era una amenaza para la comunidad y el desarrollo sustentable de las actividades vinculadas a la pesca recreativa en toda la cuenca del Toltén. Estamos hablando que este un proyecto que afectaba a 10 comunas. Y no solamente esto era represa hacia abajo, sino también represa hacia arriba, porque lamentablemente aquí se afecta el ciclo reproductivo de los peces. Esto nos iba a significar a corto plazo el despoblamiento de las especies en Pucón y Villarrica, donde hay una gran actividad de pesca recreativa. Había una afectación directa a los más de cuatro mil emprendedores que se dedican a este rubro que se traducen en boteros, guías de pesca, dueños de cabañas, restaurantes, transporte, etc. Toda la cadena productiva que hoy moviliza la pesca recreativa. “La instalación de la Hidroeléctrica Los Aromos iba a traer cesantía y pobreza”.

¿El proyecto afectaba el entorno de las comunidades?

–Este proyecto implicaba una afectación medioambiental, que fueron las observaciones que planteó el Medio Ambiente, porque afectaría la flora, fauna y bosques que hay en el sector, donde estudios de la Universidad Austral hablan de la vulnerabilidad que no fue considerada en los Estudios de Impacto Ambiental. A corto plazo este proyecto uno entendía que significaba una inversión de 91 millones de dólares, pero luego fue rebajada a 80 millones de dólares. Luego se pensaba que iba a generar empleo, pero luego se detalló que durante la construcción iba a dar 300 puestos de trabajo, pero una vez que entrara en funcionamiento los puestos bajaban a 23. La afectación del punto de vista del empleo a mediano plazo iba a ser gigante porque se iba a tener 23 puestos de trabajo, pero se iban a perder cuatro mil oportunidades para emprendedores de la cuenca.

Hay tres seremis que votan a favor del proyecto Los Aromos ¿Cree que erran en su mirada?

–No, para nada. Los seremis para poder votar a favor o en contra tienen que tener un argumento sólido del punto de vista de la cartera que ellos representan. No pueden votar por un tema personal o entregando antecedentes de otra cartera. Yo quiero respaldar a todos los seremis porque aquellos que votaron en contra me demuestra que se dieron el tiempo a estudiar y revisar todo el proceso para sacar el fundamento de su voto, porque se debe ser muy riguroso y esto comprueba que la institucionalidad funciona.

¿Qué señal se les da a los inversionistas que intentan traer centrales hidroeléctricas a los ríos de la zona?

–La señal es clara, La Araucanía es una región que tiene particularidades, por lo tanto quienes quieran ingresar a la zona con proyectos que puedan afectar culturalmente a la región o afectar su desarrollo productivo, van a tener que ser doblemente cuidadosos al presentar sus proyectos. Lamentablemente hoy vemos que los proyectos se ingresan al servicio y se van corrigiendo durante el proceso, eso es algo que debe terminar. Aquí sebe ingresar el proyecto una vez al 100%, como ocurre en los países desarrollados, pero no comenzar a corregir los proyectos durante años, hay que aumentar el estándar en la presentación. Necesitamos proyectos de parques eólicos, geotermia y paneles solares. Esta región necesita mayor innovación, mayor creatividad y rigurosidad de la empresas que quieren venir a trabajar acá.

¿Le sorprendió como la comunidad se unió para rechazar el proyecto de la Central Hidroeléctrica Los Aromos?

–Siento que la comunidad está muy atenta por los efectos de esta emergencia ambiental planetaria que se vive. Hoy no nos queda tiempo, todos los informes de los organismos internacionales nos dicen que estamos viviendo una situación compleja para el planeta. Y esa conciencia y ese empoderamiento está hoy en la ciudadanía. Los vecinos están preocupados porque saben que hay una falta de planificación en nuestros recursos hídricos en las cuencas. El gran problema que tiene hoy el país es el déficit hídrico, tenemos un alto riesgo, por eso pedí hace unas semanas la creación de la Subsecretaria de Recursos Hídricos, que es aconsejada incluso por un  informe del Banco Mundial.

¿En qué consiste esa petición?

–Hace una semana presenté un proyecto de resolución, donde le solicité al Ejecutivo la creación de la Subsecretaría de Recursos Hídricos, de manera tal que podamos trabajar, coordinar los distintos cuerpos legales que hoy están dispersos. Yo estoy en la Comisión de Recursos Hídricos, llevo un año y medio en puras comisiones, presentando diversas iniciativas, pero aún no sé quién corta el queque en el tema agua en nuestro país. Hasta el día de hoy no sabemos si es la DOH, la DGA, no hay una mirada que permita planificar el tema hídrico con responsabilidad. Y hasta que eso no quede resuelto, hasta que no tengamos actualizados los caudales ecológicos, no se avanzará. Sin agua la especie humana no vive.

 

Síguenos en Google News