Desde esta mañana, el director del Servicio de Impuestos Internos (SII), Michel Jorratt, comenzará a despachar 200 citaciones a empresas y personas, cuyas declaraciones y pagos de impuestos arrojaron incongruencias, luego de un plan especial de fiscalización iniciado en enero pasado con el fin de detectar y sancionar figuras de evasión similares a las descubiertas en el caso Penta.
En Teatinos 120 estiman que el proceso de notificación a los contribuyentes objetados, que probablemente terminará en su mayoría en sanciones y pago de impuestos, y sólo en algunos casos más graves en acciones penales,sí podría abrir nuevos flancos en una historia que hoy cruza los ánimos del gobierno, la clase política, el Parlamento y el empresariado. Pero también entre el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda y el Ministerio Público. En el SII califican esta situación como una “actitud mediáticamente hostil” de parte de los fiscales.
Por eso y con el objetivo de terminar con las discrepancias y especialmente los “emplazamientos públicos y mediáticos”, desde la Fiscalía hacia Impuestos Internos, el organismo tributario resolvió a fines de la semana pasada organizar una reunión entre Jorratt y el fiscal nacional, Sabas Chahuán. La idea es concretar el encuentro esta semana, posiblemente en dependencias del Ministerio Público.
Según altas fuentes de Teatinos 120, a la cita asistiría el “alto cuerpo directivo” del SII, integrado por los subdirectores jurídico del servicio, el abogado Cristian Vargas; de Fiscalización, Víctor Villalón, y de Normativa, Juan Alberto Rojas. Por la contraparte, se estima, participarían los fiscales que integran el equipo de Chahuán: Carlos Gajardo, Pablo Norambuena y Emiliano Arias.
Las mismas fuentes descartaron de plano que a la reunión asista alguna autoridad del gabinete de la Presidenta Michelle Bachelet, “porque no corresponde y es fundamental que se evite cualquier interpretación que pudiera llevar a un equívoco”, enfatizan.
FOCO DE TENSIÓN
La tensión con la Fiscalía, si bien comenzó en los días siguientes al 9 de enero -cuando el SII presentó la querella criminal por delito tributario en contra del ex subsecretario de Minería, Pablo Wagner San Martín, y de su cuñada, María Carolina de la Cerda- fue aumentado hasta cobrar connotación pública tras abrirse la arista SQM.
En agosto del año pasado, Gajardo decía lo siguiente a raíz del caso Penta: “Es importante aclarar que los delitos tributarios sólo pueden ser investigados cuando hay una denuncia o querella del SII, que es lo que ha ocurrido hoy respecto de estos hechos”, apuntaba el fiscal. Sin embargo, la Fiscalía ha hecho ver en privado que el SII ha actuado en varios casos con extrema cautela, sin aprovechar los espacios que existen para perseguir nuevos delitos.
Ocurrió con SQM. En la querella contra Wagner, el SII pedía incautar la contabilidad de la minera no metálica entre 2009 y 2014. La petición alertó a la clase política e incomodó a La Moneda, donde temen que aparezcan nuevos nombres de políticos con financiamiento irregular.
Pocos días después, el SII acotó su solicitud a sólo un mes: julio de 2009. La rectificación contravino los deseos de la Fiscalía. Y ello quedó en evidencia hace una semana: un oficio firmado por el propio Chahuán pidió a SQM la entrega voluntaria de su contabilidad de los últimos seis años. La empresa sigue analizando la petición y hoy resolverá si accede o no.
En el SII advierten que los ánimos se crisparon más tras las audiencia de formalización del caso Penta. “Pensábamos que, manteniendo los roles y los procedimientos, nos llevábamos bien, por decirlo de alguna manera. Pero cuando el fiscal Gajardo nos empieza a criticar por la prensa y a emplazar en la audiencia pública se da una señal errónea de poca colaboración que está muy alejada de la realidad”, reclaman en el sexto piso de Teatinos 120.
“En este caso y en cualquier otro, con alta o poca connotación pública, el SII mantiene y actúa bajo la lógica de colaboración mutua con todos los organismos correspondientes. Por eso no nos está gustando esta actuación de la Fiscalía y creemos que es positivo concretar una reunión de coordinación con Chahuán”, dicen en la repartición.
PAÑOS FRÍOS
Aunque en el SII aclaran, que en el caso de SQM, “todavía no hay antecedentes suficientes para ampliar la querella por la configuración de delito tributario, en las figuras que corresponden”, lo que fue insistentemente reiterado en la conferencia de prensa que ofreció Jorratt el jueves último, sí insisten en que siguen trabajando en ésta y todas las aristas que puedan surgir.
“Si nuestra investigación da lugar a la constatación de nuevos delitos tributarios, obviamente que ampliaremos las querellas, presentaremos otras nuevas y actuaremos conforme a todo lo que la legislación vigente determina”, señalan en el organismo.
Por eso, quienes están gestionando el encuentro entre Jorratt y Chahuán aseguran que la idea no es marcar terreno, sino “poner paños fríos” al tono crítico de los fiscales y en especial de Gajardo.
Pero la decisión de Impuestos Internos por buscar un acercamiento con la Fiscalía también pasa por preparar desde ya, comentan, el terreno para la discusión que sobrevendrá tras el plan especial de fiscalización difundido el jueves pasado.
El punto, coinciden en el equipo económico, es que si se da una arremetida de acciones judiciales como resultado de este proceso, ambos organismos actúen más mancomunadamente y que las divergencias se manejen con mayor reserva.