Publicado por: Karina Pavez | jueves 31 de diciembre de 2015 | Publicado a las: 18:40
La comida preferida de los niños quizás no debería llamarse pollo. Un equipo de investigadores, liderado por el Dr. Richard de Shazo de la Universidad de Mississippi, realizó una «autopsia» del nugget de pollo comercial. La mitad de su contenido es debatiblemente no apto para el consumo humano.
Durante su estudio, publicado en la revista American Journal of Medicine, los científicos ordenaron nuggets de dos populares cadenas de comida rápida en Estados Unidos (los nombres, aunque fáciles de adivinar, permanecieron ocultos). Al analizarlos bajo un microscopio, encontraron que contenían pollo adulterado. En una muestra, únicamente el 40% del nugget era tejido muscular (lo que comúnmente conocemos como la «carne» del pollo) y sólo 19% proteína. En la otra, había 40% de pollo y 18% de proteína.
El resto, se componía de una mezcla de vasos sanguíneos, nervios, epitelio, tejido conectivo y hueso molido. Los ingredientes que comúnmente se encuentran en el alimento para perro. Si bien la carne blanca de pollo es una de las fuentes más ricas de proteína, los nuggets son un subproducto alterado del pollo, carente de nutrientes y alto en calorías, grasa, azúcar y sal.