La pandemia ha potenciado fuertemente el canal digital donde el sector comercio evidenció un alza anual de 148,3% durante el segundo trimestre del año, según el Índice de Ventas Online de la CNC. Este escenario actual ha hecho que aquellos que aún no contaban con ventas electrónicas se suban rápidamente al carro, han entrado muchas pymes ya existentes al canal y dado el alto desempleo que esta crisis está acarreando, han aparecido también nuevos emprendedores en el mundo digital. Pero este fuerte crecimiento del e-commerce pone en escena también un fuerte incremento de la informalidad en el comercio digital donde se comercializan distintos tipos de productos sin pagar ningún tipo de impuesto, ni cumplir con ningún tipo de regulación.

Del total de transacciones realizadas en el segundo trimestre un 19% fueron informales, lo que implica un alza de 5 puntos porcentuales respecto al primer cuarto del año (14%) y prácticamente doblando lo evidenciado en el tercer trimestre de 2019 cuando se comenzó este indicador.  En cuanto al monto gastado se evidencia que $20 de cada $100 pesos son destinados a la informalidad, monto que era de $6 de cada $100 en el tercer cuarto de 2019.

Respecto a las plataformas internacionales la pandemia redujo fuertemente su participación dentro de las compras totales, pasando de representar un 32% el primer semestre a un 11% durante el segundo.

Respecto al nivel de informalidad nacional versus internacional, se ve un fuerte aumento en las transacciones informales realizadas en canales nacionales pasando a representar un 23% del total, en línea con un fuerte incremento de la oferta nacional que se ha producido durante la pandemia. Por su parte, los portales internacionales evidencian que un 14% de sus transacciones fueron informales durante el segundo cuarto del año.

Dado el gasto reportado durante el segundo trimestre, se estima un total en compras online del comercio minorista (no incluye Turismo y Entretención) de US$ 1.047,6 millones, aumentando un 75,6% respecto al primer cuarto. De este monto US$ 198,8 millones fueron destinados a compras informales en el retail digital, lo que implica un alza de 138,3% respecto al primer trimestre. De este total informal, US$167 millones se destinan a informalidad nacional y US$ 31,8 millones a informalidad o irregularidad en compras internacionales.

Del total de las transacciones informales durante el segundo trimestre un 11% corresponde a Entretención, categoría que sube su participación al comparar con los períodos anteriores, donde el primer trimestre de 2020 solo representaba un 7% del total, luego en línea con el período anterior viene Comida preparada que concentra un 10% del total, y que sumado a la categoría de Alimentación representan un 18% del total de las transacciones informales. La categoría de Alimentación representa un 7% de las transacciones informales y aumento 5 puntos porcentuales respecto al período previo. Por su parte Vestuario y Tecnología representan el 9% cada una de las transacciones informales seguidos de Belleza y cuidado personal con un 8%.

Al analizar el comportamiento de formal versus informal dentro de cada una de las categorías se evidencia que en casi todas aumenta la participación de la informalidad. Destaca un fuerte incremento en Comida preparada y Alimentación donde el 22% y 21% de las transacciones dentro de esas categorías son informales, aumentando 8 puntos porcentuales y 9 puntos porcentuales cada una respecto a la medición anterior.  Luego también se ve un incremento en Muebles/decoración y Calzado, donde dentro de estas categorías un 20% de las transacciones son informales creciendo 7 puntos porcentuales y 8 puntos porcentuales respecto al primer trimestre.

Conclusiones por Bernardita Silva, gerente de Estudios de la CNC

Los resultados de este estudio dan cuenta del fuerte aumento de la informalidad digital en el comercio que se ha producido durante esta pandemia, alcanzando un monto de 198,8 millones de dólares y más que doblando lo registrado en el primer cuarto del año. Claramente la imposibilidad de abrir las tiendas físicas ha impulsado fuertemente el canal online y a esto se suma el fuerte desempleo que ha producido esta crisis lo que ha derivado en la aparición de muchos nuevos emprendimientos en el canal digital, sobre todo en categorías de comida preparada y alimentación, donde la gran mayoría no están formalizados. Esto se refleja en el fuerte incremento que están teniendo las tiendas nacionales pymes y sobre todo las redes sociales, como canal de venta informal.

Los resultados dan cuenta de un gran desafío para las políticas públicas en cuanto a la fiscalización y control, ya que al no ser un canal presencial es mucho más difícil de detectar y porque dada la crisis económica que estamos viviendo este tipo de canal informal irá creciendo aún más, en línea con el deterioro del mercado laboral. La llegada de nuevos actores al mundo digital es algo muy positivo, aumenta la competencia, la innovación y también la colaboración en el sector través de distintas plataformas, pero necesitamos entonces incentivar y facilitar la formalización de estos negocios para que así tengamos una competencia justa en el sector. Si bien hay plataformas digitales que cumplen con todas sus obligaciones tributarias, otras no pagan impuestos e incluso venden productos que infringen la propiedad intelectual, por lo que son simplemente otra cara más del comercio ilegal en nuestro país. Otro modelo que se da mucho en este mercado digital son comercios que, si bien son formales en el sentido que tienen iniciación de actividades ante el SII, no cumplen con su obligación en el otorgamiento de boleta y pago de IVA. Dado estos escenarios, no solo estamos hablando de una competencia injusta hacia el comercio establecido que cumple con todas sus obligaciones, sino que también de la falta de seguridad hacia los consumidores al adquirir productos sin ningún tipo de garantías, y a esto se suma una pérdida fiscal estimada en US$ 38 millones de dólares por no pago de IVA en compras digitales en el sector comercio durante el trimestre.