Desde el miércoles 6 de diciembre en el Centro Cultural de Padre Las Casas estará disponible la muestra “Héroes y Villanos”, exposición de 15 acuarelas que retratan rostros y figuras ligadas a los cómics y héroes de acción. Marvel, DC Cómics, Star Wars y otros personajes que viven en el imaginario popular estarán libres para ser contempladas hasta finales de mes en el espacio de la comuna, las cuales fueron hechas por Fernanda Millanao (26), acuarelista oriunda de La Araucanía.

Este es el primer desafío de Millanao retratando rostros y figuras humanas. La propuesta nace de una invitación hecha por la institución, la cual tomó como personal por su gusto por los cómics y superhéroes. “Quise llevar mi arte más allá de la botánica, que es lo que lo que siempre me motivó a pintar acuarelas. Fue un desafío. Me permitió superarme a mí misma”, comenta.

La artista reconoce que fue un trabajo que tuvo mucho de ensayo y error. “Tuve que ocupar mucho material para poder llevar a cabo de la forma en la que veía a los personajes en mi cabeza”, admite, complementando que investigó cómics, siendo algunas acuarelas basadas en historietas de los años 50 ’s y 60 ‘s, mientras que otros personajes mantienen su sello en acuarela. Esta es la segunda exposición que la también matrona del Hospital Regional realiza este 2023 en el Centro Cultural de Padre Las Casas. “Comencé el año artísticamente ahí y voy a cerrarlo. Estoy muy contenta y muy agradecida con mi comuna y con el Centro, porque me están dando un espacio que muchos artistas desean y que yo también lo deseé en algún momento”, declara.

Taller en escuela rural

Acompañando la muestra también se expondrán las obras de estudiantes de una serie de talleres que ella realizó en la Escuela Francisco Quereban, ubicado en una comunidad mapuche, en la zona rural de Padre Las Casas. Un acercamiento al arte que generó cambios en la comunidad escolar, que cierra la experiencia presentando con quien fue su maestra durante el segundo semestre.

Son 10 obras seleccionadas del taller entre Millanao y los profesores de la comunidad, luego de haber cerrado el proceso que duró 12 clases durante el segundo semestre. La acuarelista relata que los niños “se certificaron como artistas”, siendo ellos mismos quienes dijeron “que habían aprendido cosas que iban más allá de poder pintar”. Ante ello, agrega: “Por ejemplo, el atreverse a hablar, a relacionarse con las personas, a no botar algo cuando estaba mal dibujado, sino que arreglarlo y repararlo”. Con los jóvenes, pertenecientes a cursos entre tercero a octavo básico, probaron técnicas iniciales; trabajos diversos que los interesados podrán ver hasta el 31 de diciembre en el recinto ubicado en Maquehue #1441.