Publicado por: Claudio Nuñez | miércoles 4 de diciembre de 2024 | Publicado a las: 18:42
En la segunda versión de la clínica de asesoría empresarial Impulsa MiPe de la Universidad Autónoma de Chile, emprendedores del programa de Desarrollo Local de Pequeños Emprendedores de la Municipalidad de Temuco participaron en una significativa ceremonia de certificación.
La iniciativa, organizada por la carrera de Ingeniería en Administración y financiada por la dirección de Vinculación con el Medio, tuvo como objetivo contribuir al desarrollo de los estudiantes y emprendedores a través de un aprendizaje experimental y colaborativo.
«Los estudiantes pudieron poner en práctica la teoría aprendida en clases. Además, los beneficiarios del programa municipal recibieron asesoría de los estudiantes y capacitaciones impartidas por los docentes de la carrera. Un total de 55 emprendedores se vieron beneficiados, abordando temáticas variadas como innovación, modelo de negocio, marketing, contabilidad y aspectos tributarios”, recalcó Alfredo Oyarzún, director de la carrera de Ingeniería en Administración UA.
El proyecto Impulsa MiPe proporcionó un servicio de asesoría integral a micro y pequeños emprendedores, incluyendo la transferencia de herramientas de gestión y el desarrollo de iniciativas que incrementan la competitividad y el valor de los emprendimientos.
Para Ruth Nahuelpán, profesional del programa municipal Pequeños Emprendedores de la Municipalidad de Temuco, la colaboración con la Universidad ha sido una experiencia sumamente valiosa. «Este es el primer año de nuestra alianza y ha sido muy productiva para los beneficiarios del programa, ya que el venir acá es algo significativo para ellos. Muchos nos comentaron que nunca habían tenido la oportunidad de asistir a una universidad, y el hecho de estar aquí, aprendiendo de los profesores y estudiantes, ha sido una experiencia muy provechosa», comentó.
Impacto positivo
A lo largo de cinco jornadas intensivas, los participantes abordaron módulos de innovación, negocios, marketing, fotografía, aspectos tributarios y costos, entre otros temas; donde el esfuerzo conjunto tuvo un impacto positivo en más de 50 emprendedores y más de 50 estudiantes.
Gladys Rodríguez se especializó en su emprendimiento de repostería, «Dulce Lala», donde también obtuvo la certificación para la resolución sanitaria. Su negocio comenzó en 2022 y, poco a poco, ha recibido oportunidades gracias al apoyo del municipio y, más recientemente, de la universidad.
«Este curso me fue de gran ayuda porque aprendí a llegar al cliente a través de diversos medios digitales, además de mejorar las fotografías de mis productos y su empaque», afirmó Rodríguez.
La iniciativa no solo buscó mejorar las competencias profesionales y genéricas de los estudiantes de Ingeniería, sino también apoyar el desarrollo del emprendimiento en la región, generando un impacto tangible en la economía local.