Publicado por: DiarioTiempo21 | jueves 21 de mayo de 2015 | Publicado a las: 21:17
Existe una idea generalizada dentro de las personas sexualmente activas que el “me duele la cabeza” es una de las excusas más comunes para no intimar con tu pareja o amante de turno. Es probable que así sea, pero ¿qué ocurre cuando el dolor es de verdad y llega justo después del acto sexual?
Se trata de un fenómeno que tiene una prevalencia que va entre el 0,4% y el 1% del total de las cefaleas, esto según los datos entregados por la sociedad Española de Neurología. Además sería mucho más común en los hombres, de hecho, se estima que en el 80% de los casos son ellos los que son afectados por el problema.
Los estudios afirman que el 75% de las veces se trata de cefaleas orgásmicas, las que se caracterizan por dolores de cabeza muy intensos durante el climax. Otro 25% corresponde a las llamadas cefaleas preorgásmicas, las que se pueden identificar por un dolor en la cabeza y el cuello que va asociado a la contracción muscular de dichas zonas.
Cuando la molestia se presenta antes del orgasmo, se trataría de algo benigno, que se puede solucionar mejorando algunos hábitos y sumando actos saludables, como comer sano, hacer ejercicio y reducir el consumo de alcohol y tabaco.
Ahora, cuando las molestias aparecen durante o después del clímax, lo más recomendable es recurrir a un especialista, ya que puede ser consecuencia de alguna hemorragia cerebral u otro tipo de dolencias de cuidado.
Estas cefaleas pueden tener una duración variable entre un minuto hasta tres horas, aunque también es posible que después quede un dolor residual de más tiempo. Esta puede disminuir con medicamentos como antiinflamatorios o betabloqueantes, sin embargo esto lo debe decidir un médico.