Publicado por: Claudio Nuñez | viernes 4 de marzo de 2022 | Publicado a las: 14:47
Múltiples estudios han analizado la prevalencia e impacto del sobrepeso y la obesidad en Chile. Análisis como el de The Economist, los Mapas de la Obesidad de Lenz Consultores, Word Obesity Federation Global y data de la OCDE, apuntan a que esta situación es crítica, y que, con la crisis sanitaria, ha empeorado.
En el Día Mundial de la Obesidad, cabe recordar que según datos de la OCDE el 74,2% de la población adulta en nuestro país sufre de sobrepeso u obesidad, cifra que lo sitúa en el segundo lugar, después de México (75,2%), incluso superando a Estados Unidos (71%).
En cuanto a obesidad en adolescentes, la situación no es más auspiciosa. De acuerdo al estudio The Economist, en los últimos 40 años, el número de estos jóvenes se ha multiplicado por diez, pasando de 11 millones en 1976, a 124 millones en 2016. En el caso de Chile, el Mapa Nutricional Junaeb 2020, señala que un 54,1% de niños y adolescentes en prekinder, kinder, primero básico, quinto básico y primero medio, presentan sobrepeso u obesidad.
En esa línea, la doctora Sylvia Cruchet, pediatra, experta en nutrición y académica de la Universidad de Chile, explica que lo importante es trabajar en políticas de Estado tendientes a potenciar soluciones integrales. “Considerando el contexto chileno actual, con un alza sostenida en problemáticas alimentarias en diversas poblaciones en Chile, y los altos costos asociados a los tratamientos, surge la necesidad de contar con un sistema de salud público integral que considere la prevención, el tratamiento, el financiamiento y el acompañamiento por parte de un equipo multidisciplinario”.
El nuevo escenario regulatorio
Luego de años de que las sociedades médicas y de pacientes lucharan para levantar el tema en la opinión pública y con las autoridades, el 2021 se ingresó un proyecto de ley para reconocer la obesidad como una enfermedad crónica, que, de ser aprobado, sería un hecho inédito e incluso marcaría precedente para otros países de Latinoamérica. En paralelo, a través de la ley de presupuesto, se aprobó un copago para la cirugía bariátrica.
El proyecto de ley apunta a la promoción y regulación de alimentos procesados saludables; la promoción de una dieta saludable; la prevención y control de sobrepeso y obesidad; la vigilancia epidemiológica del sobrepeso y obesidad; y estrategias de cobertura y financiamiento para el tratamiento de la obesidad.
“Como representante de miles de pacientes en todo Chile agradezco este proyecto de ley porque vamos a tener mucho más acceso a una salud digna y es una esperanza para acceder a tratamiento y acompañamiento. Esto realmente es una enfermedad crónica y al declararla como tal, avanzamos en terminar con el estigma de que la obesidad es responsabilidad del paciente”, señaló Soraya Flores, presidenta de la ONG 300 mil mórbidos
Panorama médico de los pacientes en Chile
Si bien los factores de riesgo para el desarrollo del sobrepeso y obesidad son variados, es importante considerarlas como un punto de partida para otras patologías. Es por eso que los profesionales destacan la importancia de consultar a tiempo a un médico, ya que muchas veces el estigma que hay frente a la obesidad, hace que las personas retrasen su consulta.
“Es importante que las personas se animen a pedir ayuda a profesionales especializados sin temores ni culpas, dado que la mayoría de los enfermos obedecen a causas metabólicas. Hoy en día existen alternativas efectivas de tratamiento para el sobrepeso y la obesidad, que van más allá de “hacer dieta y ejercicio”, y que ponen el foco en restaurar las alteraciones de los mecanismos que regulan el peso corporal, desde una mirada fisiopatológica, metabólica, integrativa y multidisciplinaria”, comenta María José Escaffi, médico internista, nutrióloga y académica UAI y Universidad Mayor.
El panorama en nuestro país cambia dependiente del territorio. Si analizamos el estudio de Lenz Consultores, la mayor prevalencia de obesidad se concentra en la zona sur del país, específicamente, la región de Aysén es la que posee mayor proporción de personas que viven con obesidad con un 44,3%, le sigue la región de Los Ríos con un 43,83%, y la región de la Araucanía con un 41,09%.
El estudio da cuenta también de la incidencia de la salud mental y señala que el 66% de las personas con obesidad sufren ansiedad. Más relevante aún, más de un tercio de las personas con obesidad sufre depresión, y tienen 1,4 veces más riesgo de padecer depresión que una persona con peso normal.
El doctor Arturo Zumaeta, psiquiatra de adultos del Centro de Obesidad y Enfermedades Metabólicas de la Universidad de Chile explica que, “lo más relevante en el abordaje de la enfermedad desde la salud mental es sacar el estigma, dejar de culpabilizar a los pacientes y asumir que ésta es una enfermedad crónica y como tal, requiere de un acompañamiento multidisciplinario, que fomente conductas y tratamientos adecuados para cada paciente. En el fondo, buscar el tratamiento más adecuado para cada uno en particular, y no esperar que todos los pacientes se adecúen al tratamiento del médico tratante, porque puede no ser el indicado para ella o él”, finaliza.