Publicado por: Karina Pavez | domingo 25 de enero de 2015 | Publicado a las: 09:58
Entrevista con Dauno Tótoro (hijo), militante de la organización.
La Coordinadora No Más Montajes es una expresión más de la retaguardia necesaria de las luchas populares aún disgregadas, y constituye un eslabón en movimiento de la promesa de una sociedad post-capitalista.
El estudiante de Historia de la Universidad de Chile, miembro de la Coordinadora No Más Montajes y de la Asamblea de DDHH 10 de Diciembre, Dauno Tótoro (hijo del reconocido escritor y documentalista del mismo nombre, aunototoro.blogspot.com), dio cuenta de un nuevo montaje (o fabricación de casos falsos) del Estado, esta vez contra 8 jóvenes universitarios y un trabajador el último mes de 2014.
El Estado policial chileno y su poder ejecutivo de turno no dejan de promover un clima de intolerancia al disenso y fascistización en el país. Extrañamente y negando su propio discurso “inclusivo”, la institucionalidad política del capital continúa profundizando su descrédito social y organizando a golpes las condiciones de su propia fragilidad.
La causa de la Coordinadora No Más Montajes es una expresión más de la retaguardia necesaria de las luchas aún disgregadas del pueblo trabajador, del ambientalismo consecuente, del antipatriarcado, de la resistencia Mapuche, y constituye un eslabón en movimiento de la propia promesa de una sociedad post-capitalista.
Los detalles del montaje
-¿Cuáles son los hechos?
-“Todo se originó en una manifestación ocurrida en el marco de la conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre de 2014, en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, UMCE (ex Pedagógico). En la actividad hubo un enfrentamiento en la calle entre las fuerzas especiales de carabineros y los estudiantes. Paralelamente, al interior de esa casa de estudios los jóvenes descubrieron a un carabinero infiltrado vestido de civil, el teniente Camilo Ramírez Eyzaguirre de la Dirección de Inteligencia de Carabineros (DIPOLCAR), en cuyo teléfono celular había números de comisarías, de la Policía de Investigaciones (PDI), de sargentos, etc., e incluso fotografías de cómo fabricar una bomba (radio.uchile.cl/2014/12/17/estudiantes-de-la-umce-acusan-que-carabinero-infiltrado-portaba-celular-con-fotos-de-una-bomba) . Al agente policial no se le tocó un pelo. De hecho, se ocultó en una de las dependencias de la universidad, pero de algún modo dio el aviso a sus colegas de que fue sorprendido, lo que gatilló el inmediato e ilegal ingreso de los uniformados a la UMCE en tres oportunidades consecutivas, violando la autonomía universitaria.”
-¿En qué terminó la ofensiva uniformada?
“Se llevaron detenidas a 11 personas. 9 de ellas permanecieron en la comisaría 33 de la comuna de Ñuñoa durante 26 horas: 7 estudiantes de la UMCE, uno de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM), y un trabajador de Coquimbo que había viajado a Santiago a ver un concierto de rock metálico y que iba caminando por la acera en ese momento (!). Me imagino que como llevaba pelo largo e iba vestido de negro, la policía lo consideró “un peligro público”.”
-¿Y de qué son acusados?
-“De robo con violencia, maltrato de obra a carabineros y secuestro. De acuerdo a la legislación, semejantes acusaciones hacen que los procesados por el 8º juzgado de garantía del centro de justicia arriesguen de 5 años de prisión a cadena perpetua. Finalmente fueron puestos en libertad condicional, con medidas cautelares correspondientes a una firma diaria en la comisaría en la que los mantuvieron detenidos, la que hace unos días se redujo a una firma semanal.”
-¿Qué abogados están defendiendo a los jóvenes?
“La Defensoría Popular (www.defensoriapopular.cl), con los abogados Rodrigo Román y María Rivera.”
Ampliar la retaguardia, multiplicar la resistencia
“A raíz de lo acontecido levantamos una coordinación entre los estudiantes y federaciones de la UMCE y la UTEM”, explica Dauno mientras se enciende el mediodía de fines de enero de 2015 en un café de la Alameda de la capital del país andino. “Rápidamente nos agregamos estudiantes de otras universidades y resolvimos llevar adelante una campaña de solidaridad ampliada para encarar la estrategia estatal de montajes contra todo el movimiento popular en lucha: estudiantes, trabajadores/as, Mapuche, y que el 2014 fue intensificada por la Nueva Mayoría.”
-¿Y en qué consiste esa estrategia del poder?
-“Básicamente en criminalizar a cualquier sector social en movimiento, en reprimirlo “precautoria” y selectivamente, y en la creación recurrente de montajes. Por ejemplo, en el campus Juan Gómez Millas de la Universidad de Chile, el estudiante Camilo Díaz el 8 de mayo de 2014 fue detenido en la calle y estuvo bajo prisión preventiva dos semanas en la cárcel Santiago 1 por falsa tenencia de molotov. Bryan Seguel fue tomado con el cargo de golpear a un carabinero el 1º de mayo en una actividad a la que ni siquiera asistió. El estudiante Manuel Erazo (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=193371) de la Universidad Arcis, hace poco fue sumariado sin fundamentos por la rectoría de esa institución. En suma, los casos se multiplican hasta convertirse en una clara política sistemática.”
-¿Qué papel ha jugado la Confederación de Federaciones de Estudiantes de las Universidades de Chile (CONFECH) al respecto?
“Todavía no se ha puesto a la cabeza de nuestra iniciativa como debería resultar natural. En la última reunión de la CONFECH el tema ni siquiera estuvo en el acta. Faltan muchos/as, en verdad, para la dimensión y gravedad que comporta el fenómeno.”
-¿Qué ha hecho la Coordinadora hasta el momento?
-“Actividades de denuncia pública y propaganda en las arterias principales de Santiago y en los tribunales de justicia; campañas de firmas y pegatinas.”
-¿Y por qué participas en la Asamblea de DDHH 10 de Diciembre?
“Porque estoy convencido de que es preciso hacer un frente común contra la represión, y en la Asamblea 10D hay una experiencia histórica acumulada contra la criminalización y represión estatal. Nos necesitamos solidariamente.”
La intensificación del carácter selectivo de la represión
-¿A qué achacas el comportamiento del Estado chileno?
-“Este Estado es parte de la herencia de la dictadura de Pinochet. Ello se observa en la reglamentación general de la vida de las personas, en su armadura legal antipopular, en la privatización de la salud, de la educación, de la seguridad social; en la precarización del trabajo. Para seguir así, el Estado requiere de una política represiva potente, siguiendo al pie de la letra la doctrina y la formación política y militar concreta dependiente de los intereses del Estado imperialista norteamericano. Como si fuera poco, todavía integran las fuerzas armadas y carabineros muchos violadores de derechos humanos, mientras otros tienen empresas de seguridad y corporaciones privadas. De hecho, se ha vuelto cotidiano el ingreso de fuerzas policiales a territorio Mapuche con armas israelíes de última generación. La represión contra el pueblo Mapuche es la escuela de guerra donde el Estado practica para castigar al conjunto de las luchas.”
-¿Qué piensas que pasa por la cabeza de los dirigentes de la Nueva Mayoría?
-“Mira, no me asombra que no hayan cumplido con las promesas de reformas que levantaron durante su campaña. Lo que sí me llama la atención es que el gobierno haya potenciado una línea de represión, criminalización, montaje y cooptación del movimiento popular, esta vez, mucho más selectiva, sin perder, al mismo tiempo, los golpes masivos a los que nos tenía habituado la administración anterior. Me parece que este tipo de medidas se inscriben en el complejo reordenamiento geopolítico y económico actual entre las potencias capitalistas del mundo, y en el cual Chile está subordinado al polo controlado inestablemente por Estados Unidos.”
Por Andrés Figueroa Cornejo