Publicado por: Claudio Nuñez | miércoles 19 de julio de 2017 | Publicado a las: 20:16
La cirugía de alta complejidad duró cerca de 5 horas y consistió en el reemplazo total de articulación mandibular a una paciente de 35 años, convirtiéndose en una de las primeras efectuadas en el Hospital de Lautaro.
Los cirujanos maxilofaciales, Sergio Olate y Alejandro Unibazo, pertenecientes al equipo profesional del hospital Abraham Godoy Peña de Lautaro e integrantes del equipo de cirujanos maxilofaciales del centro asistencial, realizaron la operación de reemplazo total de articulación mandibular, a una joven de 35 años, consistente en una cirugía de alta complejidad.
“La joven presentaba un desvío de su mandíbula, provocando una severa asimetría facial que le generaba dolor, problemas de cefaleas, de ruidos constantes y dificultades para alimentarse”, señaló Sergio Olate.
El especialista, indicó que “el rostro se ha desviado completamente hacia un lado y la idea de las cirugías es mejorar esta condición y disminuir los tamaños generados por estas alteraciones de crecimiento”, explicó
Según cirujano maxilofacial, Dr. Sergio Olate, explicó que esta fue una cirugía Ameloblastoma Mandibular, “en nuestros estudios de imagen, que fueron escáner, radiografías, sintigramas, resonancias, una serie de estudios, llegamos a la conclusión que ella estaba en un proceso de pérdida del cóndilo de la mandíbula izquierda; hay diferentes causas de porqué se produce esa alteración, pero la más probable, y que era lo que nosotros vinculamos al diagnóstico de esta paciente, era una necrosis avascular o una reabsorción condilar idiopática, apariencia de quistes, una serie de trastornos que causaron que el cóndilo se perdiera completamente”.
Frente a esa alteración dijo las posibilidades de recuperación eran esencialmente quirúrgicas, ya que su cara se iba quedando cada vez más asimétrica y con los problemas antes mencionados.
La cirugía fue planificada en el hospital de Lautaro y consistió en eliminar parte del cóndilo defectuoso e instalar un sistema protésico que ayude a que la articulación funcione como tal.
“La nueva generación de prótesis que nosotros utilizamos son mundialmente aceptadas, hay mucha investigación detrás de eso, las investigaciones a más largo plazo han demostrado que después de 12 años las prótesis funcionan impecables, pero son tecnológicamente más complejas de desarrollar y el costo es más elevado que cualquier otro sistema de prótesis”, explicó el doctor Olate.